La masculinidad no está reñida con la sensibilidad, ahora el hombre puede ser, además de sensible, coqueto, casero, padre cariñoso,?, características que hasta hace muy poco eran exclusivamente femeninas.
La igualdad entre el hombre y la mujer se ha ido consiguiendo a través de las ganancias de las mujeres, pero también por las ganancias respecto a nuevas identidades de lo que supone ser hombre, que conviven con las más tradicionales, pues en nuestra sociedad actual se mantiene el rol del hombre duro.
Un hombre ahora puede ser coqueto, cuidarse, preocuparse por su imagen,?, sin que su virilidad se sienta cuestionada, un hombre poder ser sensible y delicado sin que se le tache de femenino, un hombre puede ser hombre aunque sea gay, porque ni tan siquiera ser homosexual está reñido con ser hombre.
Las nuevas identidades del hombre son ya una realidad aceptada, en una sociedad mucho más plural de lo que era hace no tantos años; siempre he pensado que a mi abuelo, que en paz descanse, le daría algo si se sentase frente a la televisión un viernes o un sábado cualquiera y viese los nuevos roles de hombres y mujeres, no sé si se quedaría perplejo, se indignaría o cual sería su reacción, pero estará de acuerdo conmigo en que con mayor o menor grado de aceptación de los nuevos hombres, éstos forman parte de la cotidianeidad y ninguno de nosotros responde como lo haría mi abuelo, o al menos eso creo.
A pesar de la crisis, vivimos en una sociedad que ha ganado en valores, más respetuosa con la identidad de los demás, que permite desarrollarse a cada uno más fiel a sí mismo, a sus gustos y estilo, sin que tenga que copiar, necesariamente, un estereotipo determinado en función de su género, eso ha permitido que los hombres podamos acercarnos al mundo emocional, que estaba prohibido porque era propio de las mujeres, un mundo de una gran riqueza, por lo que me atrevo a decir que los que nos hemos acercado a este mundo hemos crecido mucho más por haberlo hecho, e incluso que nos sentimos más hombres por ello.
Seguramente nos queda mucho trabajo por hacer, pero hasta hoy los hombres hemos sacado gran partido del mundo más tradicionalmente femenino, ojalá que las mujeres encuentren en el nuestro tantas ganancias como hemos encontrado en el suyo,?, aunque no sé yo
La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.
Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.
La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.
En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.