ALBA DE TORMES | El centenario establecimiento albense protagoniza uno de los reportajes de 'Espacios a gusto'
"A 19 kilometros de Salamanca la tierra de Alba mira como pasa el Tormes por una de las localidades más conocidas de la provincia, que alcanza además su fama definitiva con la celebración del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa", así comienza el reportaje sobre Figón La Perdiz en 'Espacios a gusto', una iniciativa que contempla, la grabación y producción de una amplia serie de audiovisuales en cada uno de los restaurantes seleccionados.
Las bogas del Tormes "de toda la vida" se sirven con mayusculas en este local desde 1885. Por si solas, valen el desplazamiento, por lejos que se este. La cocina es casera de verdad. Truchas fritas y escabechadas, bacalao, chanfaina, embutidos y tapas variadas desde hace casi 140 anos junto a la orilla del rio Tormes. Daniel Delgado sigue la estela de su bisabuela como cuarta generacion -y quinta, en ciernes- en el restaurante que mas tiempo lleva funcionando sin cambiar de manos en Alba de Tormes.
"Daniel e Isabel mantienen y elevan el nivel del Figón La Perdiz, una de las citas inexcusables, tanto para el albense como para el visitante. Estuvimos por segunda vez con ellos para grabar, paso a paso, la elaboración de la tradicional chanfaina y algunas otras sorpresas, como las duquesitas que pasan por la sartén para competir con las bogas del río Tormes", así define el equipo de Espacios a Gusto a Figón La Perdiz.
La historia de Figón La Perdiz, al detalleCarmen Barba mandó construir a finales del siglo XIX (alrededor de 1885). En proceso de construcción fue usada por los mismos trabajadores para comer, lo que no sabemos es, si este hecho dio lugar a un giro en su utilidad inicial y abrió sus puertas al público como una casa de comidas o si ya se había pensado en ello antes de su construcción. De la unión de Carmen Barba con Manuel Cruz nació en esta misma casa Encarnación, más conocida como la "Nena" en 1886.
Existen dos teorías respecto al nombre de dicho Figón (1). La primera es que Carmen Barba recibiera el sobrenombre de la "Perdiz", y la segunda, y de más peso, es que la "Nena" pusiera ese nombre debido a la gran afluencia de cazadores llegados de toda España para que ella misma cocinase las perdices.
La "Nena" y su marido, Eulalio Cosme, elevan a la máxima potencia lo que se llamaría el Figón "La Perdiz". Mientras que Eulalio se encargaba de pescar bogas y barbos en el Tormes junto con otros compañeros de profesión, la "Nena" guisaba los peces fritos o en escabeche, así como liebre con patatas o alubias, conejos escabechados y perdices estofadas o en escabeche, que mandaba en el "Tren Correo" a las 18: 30h. dirección San Sebastián.
De los tres hijos que tuvo el matrimonio (Manolo, Agustina y Cheche) fue la hija la que se quedó al frente del negocio. Agustina siguió con la tradición de su madre de freír peces y mandar las perdices a San Sebastián y amplió la venta al Mercado de Abasto de Salamanca.
Años más tarde se casaría con Francisco Delgado, y tras el nacimiento de sus cuatro primeros hijos en la panadería de la calle Juderías, decidieron irse a La Perdiz, donde nacería Daniel, su quinto hijo y actual dueño del figón. En La Perdiz han comido personajes ilustres como los Doctores Marañón, D. Benjamín Palencia (pintor de excepción), D. Wences Moreno (quién mantuvo una estrecha relación con los niños de la casa), Julio Robles (cuya foto dedicada a "La perdid" con "d" sigue hoy en el local), Santiago Martín "El Viti" (quién en una ocasión tuvo que salir al balcón a saludar a toda la multitud allí congregada a verle), el Papa Clemente, los Vizcondes de Garcigrande y algunos políticos españoles
Después de que Agustina se jubilase, es su hijo Daniel quién se pone al frente del negocio. Casado con Isabel María, comienza esta aventura en la que hoy siguen embarcados, con la ayuda de sus hijas María y Cristina.
Figón La Perdiz, un espacio elegido para promocionar la gastronomia de la región
El Grupo de Acción Local Zona Centro de Valladolid, con sede en Tordesillas, en cooperación con otros cinco grupos de acción local de Castilla y León , presenta el Proyecto de Cooperación Gastronómica 'Espacios a gusto', destinado a promover el turismo relacionado con la cocina y los productos de calidad en las zonas de influencia de media docena de grupos de acción local de la Comunidad autónoma.
El proyecto de cooperación, financiado con fondos Leadercal, pretende fomentar el turismo gastronómico de todas esas comarcas, trabajando con establecimientos de contrastada calidad y con la intención de defender, al mismo tiempo, los productos de cada zona. "No se trata de un proyecto de cocina, ni de viajes, ni de publicidad de los mejores restaurantes de la zona, sino que el objetivo es, como indica el lema del proyecto, la búsqueda de espacios donde 'Comer, beber? Vivir', es decir, mostrar a través de los restaurantes seleccionados los valores que hacen de nuestro territorio un lugar muy especial".