Viernes, 29 de marzo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Leyendas de Guatemala
X

Leyendas de Guatemala

Actualizado 06/10/2014
Lorenzo M. Bujosa Vadell

Los hombres de maíz avanzan sigilosos hacia la ciudad salidos directamente del Popol Vuh. Saben adónde van, pero no saben cuándo volverán, aunque desde siempre conocen a ciencia cierta las maneras de medir el tiempo. Sienten que van a algo importante, no decisivo, no a la solución de todos sus innumerables problemas. Pero necesitan abrir al mundo la indignidad en la que llevan siglos viviendo.

Esta misma semana en uno de los tribunales especializados, el Tribunal B de Mayor Riesgo de Ciudad de Guatemala, más de treinta cuatro años después de los hechos, e integrado por tres mujeres prestigiosas, está enjuiciando al exjefe de lo que un día fue la Policía Nacional. Condenado ya hace algunos años por la desaparición forzada de un estudiante universitario. El acusado es viejo, pero el juicio persigue dignificar la memoria.

Al mediodía, en la Embajada de España, se reúne el embajador y algunos de sus colaboradores con algunas personalidades guatemaltecas para preparar un evento próximo organizado por el Instituto de Cultura Hispánica, ahí están juristas destacados que estudiaron en España, un antiguo vicepresidente de la República, un excanciller, entre otras personas.

El periódico Prensa Libre da cuenta del inicio del debate probatorio del juicio, de la existencia de pruebas anticipadas, como la declaración del propio embajador ya fallecido hace unos meses, de la dudosa utilización probatoria de los resultados de los trabajos de algunas comisiones de investigación encabezadas en su día por personalidades de la Iglesia Católica y de las Naciones Unidas. Rigoberta Menchú también declara. Su padre, cabecilla del grupo indígena, falleció en los hechos que se enjuician. Hay columnas de opinión que insisten en la implicación comunista del embajador y en sus objetivos insurgentes de movilizar a la población maya del noroccidente contra el gobierno constituido.

Han entrado los hombres de maíz y a ellos se han juntado estudiantes de la San Carlos y algún grupo guerrillero izquierdista, llevan explosivos naturalmente armas y explosivos. La rodea de inmediato la policía militarizada y a pesar de la condición de sede diplomática, de los avisos públicos del embajador y hasta de la posición inequívoca del Ministerio español de Asuntos Exteriores, irrumpen las fuerzas de seguridad se hacen guiar por personal subalterno por los recovecos del edificio y en poco tiempo se provoca un incendio. Se oye alguna voz que con sangre fría afirma: "No debe quedar ni uno". En poco tiempo la masacre está consumada. Fallecen treinta siete personas. Se salva el embajador con graves quemaduras. También gravemente herido un campesino que había permanecido largo rato bajo un montón de cuerpos inertes. Es llevado a un hospital de donde es secuestrado esa misma noche y aparece su cuerpo torturado y asesinado ante la sede principal de la Universidad Nacional.

La gente comenta sobre el juicio que se está llevando a cabo. Los hombres siguen naciendo del maíz, las mazorcas se humanizan y se mezclan con el samat, con sabor a kak ik, rodeadas de quetzales verdes con su pecho incandescente. El verde es decorado de selva, pobreza y exclusión, el rojo es memoria de la sangre derramada. Los grandes utilizaron como títeres a los débiles mayas en profunda decadencia con sus huipiles y sus pueblos catolizados para que escenificaran una de sus batallas cruentas del teatro del mundo. Las leyendas siguen vivas en Guatemala, y también la necesidad de conciliación y de esperanza.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.

Comentarios...