Una macropaella cierra una entretenida semana de fiestas

Casillas de Flores dijo adiós en la jornada del domingo a sus fiestas veraniegas, que se han prolongando durante un total de 6 días. El cierre de las fiestas tuvo forma de paellera gigante, en la que se preparó una deliciosa paella que degustaron cientos de personas en el Parque Cantarranas.

En familia o con los amigos, los vecinos habituales de Casillas junto con las numerosas personas que residen fuera que han regresado a la localidad para pasar unos días de fiesta degustaron la paella en buena compañía intentando refugiarse del intenso calor que hizo en la mañana dominical. Previamente, la Peña La Espuela había desarrollado una suelta de carretones.

Las fiestas de Casillas de Flores comenzaron el pasado martes con una comida especial para los mayores de la localidad y una tirada al plato organizada por la Asociación de Cazadores del municipio. En las noches del miércoles y el jueves se pudo disfrutar de dos actuaciones del Festival Arte en el Frontera de la Diputación.

En la jornada del viernes, los niños fueron los grandes protagonistas, con hinchables, karts y una fiesta de la espuma, mientras que el sábado la atención estuvo centrada en los eventos taurinos, con un encierro a caballo por la mañana ?que sufrió un intento de boicot-, una clase práctica de varios alumnos de la Escuela de Tauromaquia de Salamanca y una suelta de vaquillas para cerrar las actividades diurnas.

En la noche del sábado, la animación la puso la Orquesta Ébano, que ofreció una verbena muy concurrida.