Esta Plataforma que algunas veces me pone nerviosa porque admite solicitudes de firma para ir en contra de este o aquel movimiento ciudadano lo que me parece que es más una postura política-ideológica que salvar a nadie.
Elena Alfaro, una valiente ciudadana que lanzó a través de esta Plataforma hace más de un año una campaña por la gratuidad de los libros de texto en la red pública, lanza ahora una nueva petición: que la Roja done parte de sus suculentas primas en beneficio de menús escolares.
Y yo pregunto, ¿porqué ellos?. El problema de miseria que está sufriendo parte de la sociedad española y en concreto los niños es repugnante, pero obedece a un sistema político adulterado, corrupto y admitido por los ciudadanos. Sí, admitido ¿o es que no han votado un 60% de la población en las últimas elecciones europeas? ¿no han apoyado con su voto a los mismos que salen todos los días en las noticias robando a manos llenas?, ¿entonces?.
¿Por qué le tenemos que pedir a nuestra selección que sacrifique su prima mientras admitimos que los prebostes del país practiquen la desidia, la pereza, la negligencia, la apatía, y la gandulería y vivan derrochando el dinero público?
Un futbolista es un deportista profesional y no tiene porqué sentirse avergonzado de que le primen-premien su éxito. No tienen porqué sentirse obligados a suplir con su dinero el que falta porque se lo llevan otros por la cara.
¿Por qué no empezamos a pedir que sacrifiquen sus beneficios los que están marcados por el fraude y la estafa y que se van de rositas? Ahí si que tenemos donde elegir. Desde organizaciones Empresariales, Partidos Políticos a Gobierno Central pasando por Autonomías.
No se que pasará en este Mundial 2014, pero estoy segura que ninguno de los veintitrés jugadores practicará la desidia, la pereza, la negligencia, la apatía y la gandulería. Tampoco se llevará nada que no sea suyo por derecho.
Dejemos a los chicos de la Roja que hagan lo que puedan y que se lleven su triunfo merecido a casa o sufran su derrota que ya es bastante más duro que lo que viven los mangantes de nuestro país.