Jueves, 02 de mayo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Cesarismo
X

Cesarismo

Actualizado 01/06/2014
Paco Blanco Prieto

Cuando el despotismo toma cuerpo en instituciones, entidades y organizaciones sociales, la democracia huye despavorida por la ventana, dejando en manos de césares el futuro de los súbditos.

Algunos males que suceden en nuestro país tienen mucho que ver con el cesarismo reinante en la vida política, financiera y laboral, por encima de la torpeza congénita, la incompetencia personal, el cretinismo enfermizo y la sobrada prepotencia que acompaña a ciertos líderes encargados de organizar nuestras vidas, más allá de lo autorizado por las leyes y permitido por la dignidad popular.

El cesarismo es un gran riesgo para la democracia, que comenzó a ejercerse cuando Napoleón justificó todas sus actuaciones amparándose en el poder otorgado por el pueblo y bendecido por Dios. En terminología weberiana, esto nos ha llevado a los famosos "líderes carismáticos", aunque ni sean líderes ni tengan carisma, que se emborrachan de un poder que desborda con creces el otorgado por las urnas, jaleados mediáticamente por sujetos que ponen su asnal debajo del olivo para recoger el fruto que caiga cuando el caporal comience a varear las ramas.

Tal bonapartismo caló fácilmente en Alemania e Italia, y se ha extendido como una epidemia a las democracias inglesa, americana y española. La consecuencia nefasta de esta perversión democrática es la impunidad de los poderosos, fruto del reconocimiento que los dominados les otorgan, atribuyéndoles supuestas cualidades sobrenaturales para dirigirlos, con grave riesgo para todos, porque entregar tanto poder a los mandamases, disgrega al Estado de la sociedad, aleja a los gobernantes de los ciudadanos, separa a los administradores de los administrados y segrega a los alcaldes de los vecinos.

Cuando la autocracia cesarista toma cuerpo en instituciones, entidades y organizaciones sociales, la democracia huye despavorida por la ventana, dejando en manos de césares de porcelana el futuro de los súbditos. A partir de aquí se anula la opinión ajena, la crítica pasa a galeras y se trepana el cerebro de los vecinos con pretensión de llegar al pensamiento único. Es entonces cuando el podrerío alcanza su perfección, logrando que la voluntad de los césares sea la voluntad de todos, sin tener en cuenta que el despotismo es incompatible con el sentido común, opuesto al Estado de derecho y contrario a la democracia.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.

Comentarios...