Iberdrola tramita la autorización de la minicentral en la presa de Almendra

La empresa hidroeléctrica Iberdrola ha comenzado a tramitar la autorización del proyecto de construcción de una minicentral en el pie de la presa de Almendra, para lo que ha remitido al Ayuntamiento de esta localidad el estudio de ejecución de la obra, y como confirmó a Las Arribes al Día el alcalde, Domingo Vicente, "se ha enviado a Salamanca para que realicen el estudio de impacto ambiental".

La construcción de esta minicentral tiene como objetivo la recuperación medioambiental del río Tormes en sus últimos 17 kilómetros antes de su desembocadura en el Duero, tramo que ha estado sometido durante más de 40 años a una gran degradación debido al escaso caudal que desaloja la presa de Almendra. La empresa hidroeléctrica debía dotar a estas instalaciones de un dispositivo que permitiera desalojar un mayor caudal sobre el Tormes, y la fórmula adoptada es la instalación de un minigenerador de 6 Mw de potencia, que a la vez de aprovechar los recursos hídricos permitirá la regulación del caudal.

Para el regidor de esta localidad, se trata de una gran noticia para Almendra, pues las instalaciones previstas únicamente se situarían en este término municipal y ello supondrá ingresos extras para el Ayuntamiento en forma de IBI y canon energético, aunque como señaló Vicente, "el procedimiento administrativo será largo". Con estas palabras, el primer edil recordaba que el proyecto se ejecuta junto a una Zona de Uso Limitado del Parque Arribes, lo que complica su autorización.

También la Asociación Bajo-Tormes, con sede en Villarino, se congratula de la noticia, pues desde su constitución en el año 2009 la recuperación medioambiental de este tramo del Tormes ha sido su principal objetivo. Aunque son conscientes de la complejidad del proyecto por su ubicación, los beneficios que reportaría para el ecosistema del Tormes superarían con creces cualquier impacto, y recuerdan que su ubicación se enmarca junto a las actuales instalaciones de la presa, por lo que, según su presidente, Ángel Parra, "no debía haber mayor problema que el acceso".

En este sentido, desde la Bajo-Tormes recuerdan cómo prácticamente ha desaparecido la fauna piscícola en este tramo del río, una circunstancia que se ha trasladado a otras especies que se sitúan por encima en la cadena trófica, alterando así el ecosistema. La usencia de correntías en estos 17 kilómetros ha originado la terrestrificación del cauce, con invasión de masa forestal y deteriorando hasta límites casi irrecuperables el hábitat. Otra de las consecuencias es la eutrofización del agua.

La tramitación del informe de impacto ambiental y resto de autorizaciones podrían dilatarse por más de un año, un tiempo que para lo que queda del Tormes "puede ser demasiado", aseguran desde el colectivo, aunque confían en que "la buena fe de todas las partes para la ejecución de un proyecto vital para este ecosistema, pueda reducir los tiempos".

Plan Hidrológico del Duero

El proyecto de Iberdrola trata de cumplir los requerimientos realizados desde la Confederación Hidrográfica del Duero para que dote a este tramo de un mayor caudal, pues desde la construcción de la presa este ha estado limitado entre los 300 y 500 l/s, dependiendo del nivel de embalsado. La empresa alegó que las instalaciones actuales no permitían llevar a cabo este requerimiento, por lo que la CHD sugirió a la empresa que dotase a la presa del dispositivo adecuado para este cometido.

En julio de 2013 fue aprobado por el Consejo de Ministros el Plan Hidrológico del Duero, en el cual se establecen los nuevos caudales que deberá tener el Tormes aguas abajo de la presa a partir de 2015, plazo de ejecución del PHD de acuerdo con la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea, y con la que se pretende mejorar la calidad del agua y de los ecosistemas fluviales.

Según el PHD, los caudales mínimos a partir de 2015 se situarían en 67,5 Hm3 anuales en años pluviométricos normales, frente a los, aproximadamente, 10 Hm3 actuales, con aportaciones que irán de los 2,6 m3/s en el mes de abril a los 1,8 m3/s del mes de agosto. Para establecer en mayor medida su significado, cabe señalar que la aportación que recibe el cauce del Tormes de la presa de Almendra es en estos momentos de, aproximadamente, 0,4 m3/s. Los caudales propuestos tratan de simular el régimen natural del río con un aumento en las estaciones de lluvias y su disminución durante el estío.