VILLARES DE LA REINA | Una dotación de bomberos y 15 alumnos de Confaes practicaron sus técnicas con profesores especializados
Mejorar la calidad de la atención al paciente es la clave. Por eso Emersan, en colaboración con los Bomberos de la Diputación de Salamanca, ha organizado un doble simulacro de accidente en el Parque Comarcal de Villares de la Reina. Una dotación de bomberos y 15 alumnos de Confaes, que cursan la Certificación Profesional Transporte Sanitario a través de SAS (Servicio de Asistencia Sanitaria Urgente), empresa del grupo Emersan, han protagonizado una jornada imprescindible para perfeccionar la asistencia a los heridos en caso de siniestro.
La iniciativa, la organización como equipo, la coordinación entre diferentes servicios de emergencias, el protocolo PAS, el triaje para clasificar a los heridos, el rescate de las víctimas y su inmovilización son aspectos esenciales que se perfeccionan en citas formativas e imprescindibles como esta
En citas como esta el reto es "optimizar la coordinación entre los servicios sanitarios y el cuerpo de Bomberos, algo esencial en caso de accidente", afirma Sergio Sánchez Rubio, técnico en transporte sanitario (TTS) en la base de emergencias de Béjar y evaluador en este doble simulacro. Si bien la rapidez es esencial para actuar y "cuanto menos tiempo se tarde, mejor", mucho más importante es la "calidad de la atención a los heridos" de un siniestro.
Así, los profesores Araceli Rodríguez, enfermera de emergencias, y Jesús Ignacio Rodríguez Cruz, TTS de Emersan en la base de Peñaranda, han planteado dos supuestos prácticos: dos accidentes de tráfico entre un Peugeot 306 y un Ford Fiesta CLX. Los participantes han tenido que actuar como si se tratase de accidentes reales, poniendo en práctica sus conocimientos para sus víctimas, trasladadas a dos vehículos SVB (soporte vital básico) de Emersan.
En el primer supuesto había cinco heridos, entre los que se encontraba un bebé y cuatro heridos más atrapados que han tenido que ser rescatados por los bomberos; y en el segundo, nueve heridos, tres de ellos atrapados, un peatón atropellado y un testigo nervioso que entorpecía la labor de los profesionales. Finalizado el doble simulacro, donde los alumnos se han repartido los papeles de "heridos" y "rescatadores", hubo una puesta en común para pulir los fallos.