"El reto era dar personalidad a Juzbado, crear un pueblo amable para los vecinos y atractivo para...

No es fácil quedarse con uno de los muchos proyectos que se han ejecutado en los últimos años en Juzbado, desde la restauración de la peña del Castillo, al Museo de la Falla, la Casa del Maestro, la rehabilitación de la iglesia, el campo de fútbol o la zona deportiva de Los Berrocales. Un municipio que ha puesto en valor sus señas de identidad. "Hemos querido darle personalidad, crear un pueblo amable para los vecinos y atractivo para el visitante". Quien mejor que su alcalde, Fernando Rubio, para hablar del presente y del futuro de Juzbado.

Pregunta.- Han sido muchos los proyectos ejecutados, pero ¿se ha quedado alguno pendiente para la recta final de la legislatura?

Respuesta.- Siempre quedan cosas, pero lo ahora lo más importante es que, por fin, se ejecute el proyecto de recuperación de la ribera del río. El proyecto está aprobado por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), pero llevamos pendientes tres años. El proyecto está, lo que no sabemos es cuándo se ejecutará. Estamos hablando de un proyecto muy bueno y que permitirá actuar sobre un kilómetro y medio.

P.- En una situación parecida, de espera, está el proyecto de crear un albergue municipal.

R.- La antigua casa parroquial que adquirió el Ayuntamiento, un proyecto para el que tenemos un protocolo firmado con la entonces ministra de Vivienda. Proyecto que ha de continuar porque es un compromiso de Gobierno.

P.- Mientras estos proyectos se desbloquean, ¿en qué otros trabaja el Ayuntamiento?

R.- Lógicamente, seguimos activos. Uno de los más importantes, porque además es necesaria, es la urbanización de calidad de todo el centro del pueblo y de los acceso a esta zona. Es algo que queremos empezar a hacer ya.

P.- De todo lo realizado en estos últimos años, contando esta legislatura y la anterior, ¿de qué proyectos, como alcalde, se siente más orgulloso?

R.- De los accesos al pueblo, de la carretera a San Pelayo y de los caminos señalizados. En definitiva, de las rutas que se han abierto para llegar hasta Juzbado. También estamos muy contentos del adecentamiento de la peña del Castillo y, por suspuesto, del Museo de la falla o y de la zona deportiva. Pero hay más, como la Casa del Maestro, el campo de fútbol o, muy importante, el arreglo de la iglesia y del entorno.

P.- ¿Estas inversiones se han traducido en mayor dinamismo?

R.- Se ha traducido, sobre todo, en mucha participación. Se ha conseguido además crear una dinámica y una relación mucho más intensa con empresas y administraciones. Nuestro objetivo siempre ha sido dotar a Juzbado de una personalidad propia, crear un pueblo amable para el vecino y atractivo para el visitante, desde el punto de vista cultural, deportivo, social, paisajístico... Un ejemplo es Juzbado, Libro Abierto. Para nosotros ahora es una satisfacción que poetas de renombre nos llamen para venir a visitar el municipio.

P.- ¿Qué ha significado Libro Abierto para Juzbado?

R.- El haber logrado ser una referencia nacional. Con la poesía hemos propuesto algo nuevo, la interacción entre literatura y paisaje. Libro Abierto es toda una satisfacción.

P.- ¿Cómo ve el futuro de Juzbado?

R.- De cara al futuro, Juzbado ilusiona mucho.

P.- ¿Y el de los pequeños pueblos?

R.- En esto también estamos contentos por haber plantado cara, dentro de nuestras pequeñas posibilidades, a la agresión del Gobierno contra los pequeños pueblos. Estamos ante una ley de moratorias que persigue desanimar y amortizar a los pueblos. No creen en el desarrollo rural. El Gobierno y la Junta consideran que estarán mejor cuantos menos pueblos haya, cuando en lo que habría que fijarse es en crear un medio rural productivo, vertebrado y cohesionado. Si hay poca gente, suprimimos el médico, cuando lo lógico debería ser al revés, pongamos un médico para que no se vaya la gente. Afortunadamente, siempre habrá gente comprometida con el medio rural.