Fran García, un Obispillo salmantino en el Valle de los Caídos
Natural de Alba de Tormes, estudia en la Escolanía desde hace dos años y apura sus últimos meses de mandato
Desde el pasado 1 de mayo de 2018, el niño salmantino Fran García Hernández, natural de Alba de Tormes, es el Obispillo del Valle de los Caídos. Le acompañan en este mandato el Vicario, Rafael F. B, de Guinea Ecuatorial y residente en la provincia de Toledo, y Santiago T.P, que ejerce las labores de secretario y es natural de Madrid.
En 2018, la festividad de Santa Escolástica cayó en sábado, por lo que la elección del nuevo Obispillo de la Escolanía se celebró el lunes 12 de febrero, memoria de San Benito de Aniano, abad de origen visigodo en el Imperio Carolingio que impulsó una importante reforma con la difusión de la Regla de San Benito de Nursia entre todos los monasterios del Imperio.
El Obispillo anterior, Monseñor Juan Pablo M. M., impuso el solideo, el pectoral y el anillo al nuevo Obispillo salmantino. Tras la votación celebrada a modo de cónclave y con todos los escolanos revestidos con la cogulla, y tras la aceptación del elegido y esta primera investidura, todos los compañeros les dieron el abrazo y, a la salida de la capilla de la Escolanía, los tres miembros del nuevo equipo episcopal fueron manteados por todos los demás chavales.
La Fiesta de la Escolanía: El día del Obispillo
Fran García tomó posesión definitiva el 1 de mayo, coincidiendo con la Fiesta del Obispillo, con orígenes en la Edad Media. La toma de posesión tuvo lugar antes de la Santa Misa conventual, cuya procesión de entrada estuvo presidida por Fran García, acompañado del Vicario y el Secretario.
Después de la misa y de las fotos de rigor, las familias visitaron la cúpula y a continuación tuvo lugar el beso del anillo y reparto de golosinas para todos los niños en el claustro de la Escolanía. Tras la comida de hermandad, el acto de la tarde se celebró en el salón de actos. El Obispillo leyó el pregón y se procedió a la entrega de trofeos deportivos y de diplomas y premios del área escolar.
Los actos del primero de Mayo giran en torno a la figura del obispillo. Durante la mañana tiene lugar la investidura y la misa conventual y se continua en la hospedería externa con el rito del beso del anillo, y la comida junto a familiares y amigos.
Según el Padre Santiago Cantera, "la tradicional fiesta del Obispillo nació en una época de una época de fuertes convicciones religiosas, se quería ofrecer una lección de humildad para los adultos, quienes deben tomar conciencia de lo provisional de sus puestos y ceder ante la inocencia de los niños que les relevan en sus cargos y que este día son los únicos y verdaderos protagonistas".
Por entonces, explica Santiago Cantera, "había catedrales donde los niños cantores se sentaban en las sillas altas del coro, mientras que las dignidades y los canónigos lo hacían en las bajas, intercambiando así sus puestos ordinarios".
Canto gregoriano a diario
Además de ostentar el cargo de Obispillo, Fran García forma parte de la Escolanía de la Abadía Benedictina de Santa Cruz del Valle de los Caídos, una de las formaciones corales más prestigiosas de España, constituida por unos cincuenta niños. La Escolanía, la única del mundo que todos los días canta gregoriano, nace en 1958 con la finalidad de contribuir a una mayor solemnidad en las celebraciones litúrgicas de la Basílica del Valle de los Caídos.
En la Escolanía, niños como Fran reciben una sólida y personalizada formación académica y musical. Junto a los estudios oficiales de Primaria y Secundaria, estudian Lenguaje Musical, uno o dos instrumentos, Música de Cámara y, por supuesto Canto Coral. Su repertorio abarca desde el canto gregoriano hasta la polifonía sagrada y profana de las diferentes épocas de la historia de la música. Diariamente, cantan en la Basílica la misa solemne, junto a los monjes benedictinos.
La Escolanía ha ofrecido conciertos por diferentes países, el año pasado Fran García viajó hasta Chile y este verano estará en Alemanía