Se baraja la posibilidad de que se trate de parte de la huída de los autores de un robo en una tienda de telefonía en Béjar
Guijuelo se ha despertado esta mañana con la noticia de dos robos de vehículos en el centro de la villa. Uno de ellos en la calle Abajo y el otro en la calle Santa Rita y en el mismo lapso de tiempo, por lo que se sospecha que han sido los mismos autores para ambos delitos.
El primero de los robos se ha producido en la calle Santa Rita. Una familia aparcó su Renault 5 de color gris con matrícula SA-0344-I a la puerta, como hacen habitualmente. Se comprobó que el coche estaba en su lugar en torno a las 03:00 horas. Al salir por la mañana, a las 10:15 horas, el vehículo había desaparecido, sustraído en ese intervalo de tiempo. "Es más la molestia que el valor del coche, porque es muy viejo, pero a mi me hacía el servicio. Además, se han llevado dos motosierras que había en el maletero, porque íbamos a una finca a podar unas encinas", ha manifestado la dueña a GUIJUELO Al DÍA. Al denunciar el caso a la Guardia Civil, se encontraron con un caso similar producido pocos minutos antes.
Otro vecino de la villa detuvo su Seat Ibiza de color rojo con matrícula 9645-BJL junto a un bar en la calle Abajo para comprar tabaco en torno a las 10:00 horas. Debido a la hora y lo céntrico de la calle dejó las llaves puestas. Al salir del bar con los cigarrillos, el coche ya no estaba. En este caso, el ladrón se marchó con el móvil y las llaves de casa del dueño. Tras comprobar que no había sido una broma, se dio parte a la Guardia Civil y se llamó al móvil del propietario, aún en el interior del vehículo. Según declaraciones de los propios dueños, contestó la voz de un hombre joven sin acento extranjero con un escueto: "El coche está en Campillo". Dos patrullas de la Guardia Civil y los propietarios del Seat Ibiza se trasladaron a la cercana pedanía para recorrer las calles. Sin embargo el coche no apareció. Tras llamar una segunda vez, la misma voz respondió de nuevo que el coche estaba en Campillo, apagando definitivamente el teléfono. Sin embargo, el vehículo sigue sin aparecer.
Una de las teorías que barajan las fuerzas de seguridad, según los denunciantes, es que se trata de la huída de los autores de un robo en una tienda de telefonía en la ciudad de Béjar, y que en su escapada han intentado despistar cambiando rápidamente de medio de transporte, lo que explicaría que los modelos elegidos sean coches antiguos, más fáciles de sustraer por métodos tradicionales.