El homenaje a lo tradicional protagoniza la VII matanza típica

Santibañez de la Sierra mira al pasado en la celebración de su séptima edición de la matanza típica. La cita contó con el primer nombramiento de Matancero Mayor de la localidad, honor que recayó en Manuel de Arriba, habitual matarife de la localidad en los últimos años. Además, se expuso un refranero popular de la matanza, con diversos refranes alusivos al cerdo. En torno a 150 personas acudieron al festejo que comenzó a primera hora de la mañana y que se extendió hasta por la tarde, momento en que se ofreció un homenaje a la Constitución.

Manuel de Arriba se convirtió así en el primer Matancero Mayor de Santibañez de Sierra. El que fuera concejal del Consistorio serrano, es el encargado desde hace muchos años de hacer las veces de matarife, incluyendo la seis ediciones anteriores de la fiesta matancera en la localidad. El alcalde, Francisco Aguadero, señaló que de nuevo se ha intentado contar con una fiesta de la matanza auténtica: "Desde que recuperamos la matanza, siempre hemos querido dar el tono que se merece, tradicional, casero y cercano, y por eso hemos decidido nombrar matancero a Manuel de Arriba, que ha sido parte de esta fiesta desde el principio. Además, contamos con el mercadillo, esta vez con artículos hechos a mano y hemos recuperado viejos refranes de la matanza, está siendo una jornada fantástica y el tiempo nos ha permitido celebrarla sin problema". Entre el público también se encontraba Mauricio Angulo, alcalde de Sequeros, localidad que celebrará su propia matanza el próximo 3 de febrero.

Las actividades matanceras comenzaron a las diez de la mañana, con el tradicional aguardiante y perrunillas para abrir boca. Tras la llegada del marrano ya sacrificado, se procedió al despiece por parte de Manuel de Arriba. Las diferentes fases del proceso fueron comentadas en directo por Rubén Salinero, de Kamarú Teatro, quien tomó el papel de alguacil o pregonero, compartiendo con el público los mejores detalles. Los presentes pudieron disfrutar de numerosas degustaciones. Al desayuno tradicional, se sumaron otros platos típicos de matanza, como hígado encebollado, costillas, tocino y morro, todo ello cocinado a la brasa del fuego ubicado en plena plaza Mayor. Tras la presentación del Matancero Mayor, se sorteó uno de los jamones del cerdo sacrificado hace dos años. A continuación, se compartieron las esperadas patatas meneás con chicha blanca, roja y torreznos.

El resto de la jornada se dividirá en dos partes. En la primera de ellas se apostará por la gastronomía, con dos degustaciones más. Finalmente, la Constitución Española , recibira un homenaje en el salón municipal.