Si quieres tener la posibilidad de publicar nuevos contenidos en tu sitio web y modificar las páginas ya creadas, sin necesidad de aprender diseño web, puedes optar por un desarrollo web a medida o usar un CMS comercial o de código abierto.
La semana pasada definíamos el concepto de web autogestionable o autoadministrable. Hoy mostramos las diferentes vías por las que puedes conseguir un sitio web autoadministrable.
Puedes optar por varios sistemas que te permitan modificar tú mismo los contenidos de tu página web, mediante un sistema intuitivo y de fácil aprendizaje. Cada uno de ellos tiene sus ventajas e inconvenientes, que pasamos a comentar:
En este caso, un equipo de informáticos se encargará de definir contigo, y posteriormente programar a medida el sistema web ajustado a tus necesidades específicas.
La ventaja principal es la flexibilidad que aporta, ya que puedes pedir las funcionalidades y formas de presentación de los datos, accesos autentificados, diseño, etc, que desees. Una vez programado, podrás utilizar las funciones creadas, pero si deseas disfrutar de nuevas características, necesitarás que los programadores las implementen.
En el lado negativo está que el coste puede llegar a ser elevado, en función de la complejidad del sistema, ya que será programado sólo para ti, y todo el esfuerzo de programación empleado no será rentabilizado con su venta a otros clientes.
Un CMS o sistema de gestión de contenidos es una aplicación web que permite crear un sitio web completo y todas las páginas web que se deseen, mediante un entorno relativamente amigable y sencillo. Cuanto más funciones permita el sistema, más complejo será su manejo, aunque a menudo puede ser suficiente utilizar sólo las funciones más básicas.
Podemos clasificar los CMS del siguiente modo:
Son aquellos que permiten ser instalados en cualquier alojamiento web de forma gratuita, ya que sus programadores han decidido permitir su uso sin pago de licencias.
Muchos CMS están especializados según la función principal del sitio web, por ejemplo:
El más utilizado actualmente es WordPress, un CMS para crear blogs cuyas funcionalidades son ampliables mediante diversos plugins. Google ofrece Blogger, un sistema de blog que incluye servicio de alojamiento gratuito.
Existen CMS de propósito general como Joomla, Drupal, sistemas de eCommerce (tiendas online) como PrestaShop, y de aprendizaje como Moodle.
No requieren cuotas mensuales ni periódicas, aunque debes pagar al proveedor de alojamiento el coste del dominio y del espacio web.
Para muchos usuarios, será imprescindible contar con un informático experto en dicho CMS para configurarlo completamente, ajustarlo a sus necesidades y sacarle partido adecuadamente.
Son los que ofrecen muchos proveedores de hosting (alojamiento web), que funcionan sólo en su sistema. Permiten una variedad de plantillas de diseños y funcionalidades a cambio de unas cuotas mensuales. Algunas de las funciones más avanzadas incrementarán la cuota periódica.
Su manejo suele ser más sencillo que el de un CMS abierto, ya que está orientado a usuarios con menos experiencia informática.
Dependerá de varios factores:
Es habitual que un cliente nos pida crear un sitio web autogestionable con el objetivo de ir creando nuevos contenidos a menudo, pero que realmente no tenga tiempo de encargarse de redactar contenido original, de renovar los contenidos, y en definitiva, de alimentar las páginas web con noticias, novedades, promociones y demás información útil para sus potenciales clientes.
Por eso, las empresas de Diseño web y posicionamiento SEO ofrecemos servicios de redacción profesional de textos para páginas web, lo que últimamente se ha dado en llamar "copywriting", que te permiten renovar tu web y hacerla fresca e interesante para tus visitantes.
Fernando Sánchez Gómez
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