Ya en mí anterior artículo hacía mención al bien remunerado filántropo y abogado Sudafricano Brian Currin, y fíjense, sorpresa!!!!! No han pasado un par de semanas desde mis últimas letras y miren por dónde, otra vez, la puesta en escena de los terroristas y su estrategia, ahora toca el carnaval de los encapuchados, acompañados por Ram Manninkalinghan, y su mentor Brillan Currin, para vendernos ese "gesto significativo" de feria, de monte y desmonte de chiringuito de Terroristas.
Una vez más han venido a hacer caja con nuestros muertos, y todo esto con el apoyo y beneplácito de los Nacionalistas Vascos, estos son los que, realmente, están esperando a recoger las nueces.
No me cansaré a decirlo, porque me parece una auténtica burla a todos los españoles y sobre todo a las víctimas del terrorismo.
Quien nos puede decir o explicar, ¿quién los trae?, ¿quién los paga? Y ¿para qué vienen?
Lo único que me cabe entender sobre todo, por la proximidad a estos días carnavaleros, que es una escenificación al carnaval macabro y sangriento al que nos tienen acostumbrados los de las capuchas y pasamontañas, y su propia estrategia para internacionalizar el no sé qué conflicto, en el que siempre, han sido los mismos, los que han disparado el tiro en la nuca, y los mismos, siempre, los que han puesto los muertos, ¿qué conflicto es este?
Los únicos verificadores que deben intervenir son la Guardia Civil y la Policía, con la detención y puesta a disposición de la justicia, de tanto y tanto terrorista que aún queda por ahí, sin rendir cuentas, por tantos y tanto asesinatos, o la entrega voluntaria de estos, junto con la ubicación de sus zulos donde tienen escondidos sus arsenales.
Echo en falta la rebelión cívica, de aquellos tiempos cuando era presidente de la AVT, Francisco José Alcaráz, aquel movimiento en el que unos pocos fuimos capaces de parar un proceso de negociación, duro y difícil fue, pero ¿dónde está ahora la AVT?
¿Qué está haciendo frente a todo este Carnaval? Palabras, sin más.
Menos mal que aún veo a representantes de Covite, a Toñi Santiago y su marido, papás de Silvia, la niña asesinada en Santa Pola, dirigirse al tribunal de Estrasburgo, donde se pide, pedimos, de alguna manera representados por ellos, que se abra una investigación por tantos y tantos crímenes de trascendencia internacional, y que sean imprescriptibles al ser un ataque continuo contra la población civil. Ese Tribunal, el mismo que con tanta euforia dio por zanjada la doctrina Parot, y que se mostró tan comprensivo con todos los terroristas, y la mayor chusma de este país.
¿Ustedes creen que este Tribunal tendrá el mismo trato, de esa supuesta imparcialidad a la hora de aplicar las leyes, con todas estas demandas, legítimas a todas luces, y a mi entender?
Lo comprobaremos no tardando?