La CHD invertirá 3,5 millones para mejorar la conectividad fluvial de los ríos Águeda, Huebra y...

El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), ha licitado por 3.599.685,17 millones de euros distintas actuaciones destinadas a mejorar el estado ecológico y la conectividad de las masas de agua superficiales de la provincia de Salamanca con un plazo de ejecución de tres años. Estas actuaciones afectan a los ríos Águeda, Yeltes y Huebra en su transcurso por la comarca de Vitigudino.

Los proyectos a acometer tienen como finalidad principal facilitar la circulación de las aguas superficiales para evitar problemas de inundaciones en las crecidas ordinarias de los ríos, así como mejorar la calidad de los cauces que reciben vertidos directos. El principio rector es conseguir la mejora de las condiciones hidráulicas de los ríos, respetando al máximo los valores medioambientales y naturales.

Entre las actuaciones más destacadas se encuentran aquellas dirigidas a la mejora de la conectividad longitudinal de los ríos mediante la construcción de dispositivos de pasos de peces y la demolición parcial o total de los obstáculos transversales, y se va a mejorar la conectividad lateral con el retranqueo o eliminación de motas, recuperación de meandros y modificación de taludes en riberas. En concreto, se demolerán 25 azudes o pesqueras, y se construirán 7 pasos de peces mediante escalas o represas.

Las actuaciones en el río Huebra afectan al tramo comprendido entre la confluencia del río Yeltes y su desembocadura en el Duero en la zona de tajamares de la central hidroeléctrica de Saucelle II. En este tramo, cuyo estado ecológico se considera moderado, se procederá a la demolición de 9 azudes enclavados en los términos municipales de Yecla de Yeltes, Cerralbo, Encinasola de los Comendadores y Saldeana. También, en esta misma localidad, dos de sus actuales azudes contarán con la construcción de dos pasos de peces.

En el río Yeltes las actuaciones se desarrollarán en el tramo comprendido entre la rivera de Campocerrado y su desembocadura en el río Huebra, extendiéndose además al arroyo Bogajuelo, el río Gavilanes y la rivera de Campocerrado. Como en el anterior, el estado ecológico de sus aguas es considerado de moderado Se procederá a la demolición de 14 azudes ubicados en los términos municipales de Retortillo, Villares de Yeltes y Villavieja de Yeltes, y se procederá a la construcción de 5 pasos de peces en otras tantas pesqueras, tres de ellas en Villares de Yeltes, uno en Retortillo y otro en Villavieja de Yeltes.

En cuanto a las actuaciones en el río Águeda, estas afectarán al tramo comprendido entre la confluencia del arroyo de la Granja y la confluencia de la rivera Dos Casas. Como los anteriores tramos, su estado ecológico es considerado moderado, y entre las actuaciones sobresale la demolición de dos pesqueras, una en el término de San Felices de los Gallegos y otra en Ahigal de los Aceiteros.

Otras actuaciones

Además de las anteriores, el proyecto contempla el mantenimiento y conservación de cauces mediante la limpieza y extracción de vegetación seca y/o arrastrada sobre el cauce, vegetación invasora cañaverales y carrizales, y la extracción de fangos y sedimentos acumulados en pequeños cauces.

También se prevé la mejora del estado ecológico de las masas de agua, del hábitat y de comunidades piscícolas. Para ello se acometerá la limpieza de frezaderos y la restauración de márgenes erosionadas con técnicas de bioingeniería y mejora de la composición y estructura de la vegetación riparia.

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El bajo Tormes, el gran olvidado

Por otra parte, una vez más el bajo Tormes, tramo comprendido aguas abajo de la presa de Almendra y su desembocadura en el Duero, es el gran olvidado en los proyectos de recuperación medioambiental y piscícola que lleva a cabo el Ministerio de Medio Ambiente.

A pesar de tratarse de un tramo de gran importancia medioambiental dentro del Parque Natural Arribes y haber estado sometido a un impacto sin precedentes por el escaso caudal que desaloja la presa de Almendra, el proyecto de la CHD no contempla actuación alguna. Durante más de 40 años, desde la construcción de la presa de Almendra, este tramo ha estado limitado a menos de 500 l/s de caudal, lo que ha modificado el cauce del río y con ello el hábitat de las especies que lo pueblan. Esto se ha traducido en la práctica desaparición de algunas especies piscícolas, alterándose así la cadena trófica.

Este tramo de 17 kilómetros del Tormes presenta problemas de terrestrificación, eutrofización del agua, abundante masa forestal muerta a lo largo de su cauce, desaparición de frezaderos y acumulación de fango ante la ausencia de correntías, especialmente en la zona de Ambasaguas debido a los periodos de inundación como consecuencia del embalsado del Duero. Todas estas circunstancias están poniendo en serio peligro a uno de los hábitats más diversos e importantes ?por las especies que cobija? del Parque Natural Arribes del Duero.

Durante el Gobierno del PSOE, desde la CHD se promovió un proyecto de recuperación medioambiental de este tramo por importe cercano a 800.000 euros. Con la llegada del Gobierno del PP el proyecto "parece haberse metido en algún cajón", señalan desde la Asociación Bajo Tormes, colectivo de pescadores y conservacionistas que desde 2009 luchan por la recuperación de estos 17 kilómetros del Tormes, actualmente con una alta degradación de su hábitat natural.

El olvidado proyecto de recuperación del bajo Tormes

El proyecto promovido desde la CHD, con Antonio Gato en la Presidencia e Ignacio Rodríguez Muñoz como comisario de Aguas, contemplaba dos aspectos diferenciados pero al mismo tiempo vinculados en el sentido original de la propuesta de la Asociación Bajo-Tormes, y que consiste en la recuperación medioambiental de este tramo de 17 kilómetros de río aguas abajo del embalse de Almendra.

Por un lado, el estudio aquí olvidado recogía la recuperación hidrológica y el hábitat piscícola, y por otro dotaba a este tramo de varios elementos de uso público que dabn un valor añadido a este espacio al objeto de garantizar su conservación. Entre estas últimas actuaciones dirigidas al uso público, figuraba la recuperación de senderos en ambos márgenes del río, además de la construcción de tres pontoneras o pasarelas repartidas en los últimos 8 kilómetros del curso fluvial, concretamente en los parajes de Ambasaguas, Valdosa y Vendemoro; así como la recuperación de la aceña situada en el paraje de Vendemoro.

A estas intervenciones se sumaban otras para la mejora el hábitat piscícola. En este campo se procedería a la limpieza de residuos en todo el tramo; al acondicionamiento de frezaderos para los peces; tratamiento de la vegetación riparia para la mejora de las condiciones hidráulicas eliminando obstáculos y actuando en la ribera en una longitud de 2.800 metros discontinuos; así como la eliminación de las dos pesqueras situadas en Ambasaguas y la permeabilización de ocho azudes más situados hasta la presa de Almendra.