La ofrenda floral a Unamuno destaca su estrecha vinculación con los Dominicos a lo largo de su vida

El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, destacó este jueves en la ofrenda floral a Miguel de Unamuno su defensa de la "unidad de España" desde el reconocimiento a las tradiciones, a las peculiaridades, a la diversidad de los distintos pueblos y regiones.

Con motivo del octavo centenario de la fundación en Toulouse (Francia) de la Orden de Predicadores, el prior de los Dominicos en Salamanca, Ricardo de Luis Carballada, acompañó al alcalde en la ofrenda junto a la estatua que recuerda en la calle Bordadores a Miguel de Unamuno, de cuyo fallecimiento este 31 de diciembre de 2015 se cumplen 79 años. El alcalde destacó también la vinculación de Unamuno con los Dominicos, cuya historia ocho siglos centenaria es también paralela a la de la propia ciudad de Salamanca.

Fernández Mañueco incidió en la "íntima relación" de Unamuno con los Dominicos a lo largo de toda su vida y especialmente en sus crisis de fe que, en el año 1897, le llevó incluso a recluirse durante tres días en el convento salmantino de San Esteban.

Recordó, además, que los Dominicos llevan casi ocho siglos asentados en Salamanca, casi tanto como la Universidad cuyo octavo centenario se cumplirá en 2018. Santo Domingo mandó la fundación en Salamanca de un convento porque quería que sus frailes estuvieran presentes en las ciudades universitarias y, muy probablemente, se establecieron aquí en 1922.

Después de casi ocho siglos de diálogo con la ciudad, el alcalde destacó que las personas de Salamanca entienden que no sólo el convento de San Esteban, sino también la propia Orden de los Dominicos son "parte de nuestro patrimonio material e inmaterial". De hecho, durante estos ocho siglos el convento de San Esteban ha sido desde centro de estudio y Facultad de Teología, hasta albergar el Museo Provincial o incuso cuartel ocupado por las tropas napoleónicas. Tanto su esplendor como sus crisis están también unidas a la propia historia de Salamanca, llegando incluso a ser expoliado su mobiliario y biblioteca tras el decreto de la supresión de los religiosos en 1835, salvándose el convento 20 años después gracias a la iniciativa de un grupo de intelectuales salmantinos.

De su intensa actividad intelectual también se ha beneficiado la Universidad de Salamanca que en el siglo XVI adquirió gran prestigio de la mano de insignes teólogos de San Esteban, como Francisco de Victoria, iniciador de la 'Escuela de Salamanca' y creador del Derecho Internacional, Domingo de Soto, Melchor Cano, Antón de Montesinos o Diego de Deza, protector de Cristóbal Colón y preceptor del príncipe Juan.

Por otra parte, Alfonso Fernández Mañueco reconoció al creador Miguel Ángel Bejarano que falleció el día de Nochebuena, siendo su último trabajo el diseño del marcapáginas conmemorativo del que se han repartido 1.000 ejemplares.

Agradeció también a la Asociación Amigos de Unamuno en la persona de su presidente, Francisco Blanco, que, por segundo año consecutivo, haya sido la encargada de organizar el homenaje al pensador bilbaíno.

En el acto participó la Banda Municipal de Música de Salamanca que interpretó, entre otras piezas, "Ronda de Castilla" de Ricardo Dorado, "De Atxuri al Arenal", "Véante mis ojos" de J.I.Cotobal, el Himno Nacional durante la Ofrenda floral y "Maite", de Pablo Sorozábal, para concluir el acto.

El actor salmantino José Antonio Sayagués condujo el homenaje que, además de recordar a don Miguel, tuvo un recuerdo especial para Santa Teresa de Jesús, de la que recientemente se ha celebrado el V centenario de su nacimiento. Con motivo de este aniversario, Francisco Blanco, presidente de la Asociación Amigos de Unamuno, es el autor de la dramatización que ha profundizado sobre la coincidencia y la discrepancia en el pensamiento de Unamuno y Santa Teresa.

Esta dramatización ha sido dirigida por Pablo Málaga e interpretada por Manuel Blázquez y Cristina Redondo. Una vez concluida esta actuación, el alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, acompañado del prior de los Dominicos, ha realizado la tradicional ofrenda floral junto a la estatua de Miguel de Unamuno en la capital salmantina.

Actualmente, la comunidad de los Dominicos en Salamanca es rica por su diversidad al estar integrada por unos treinta frailes de ocho naciones, de cuatro continentes y con edades comprendidas desde los veinte hasta los ochenta años.

Fotos: Alberto Martín