Tras formalizar la inscripción, los senderistas recibían el ticket de la comida y una bolsa como obsequio conmemorativo de una de las ediciones más concurridas que se recuerdan en los 29 años de historia de este evento
Después de dos meses de lluvia no estaba escrito pero se intuía, que este último domingo de marzo Mieza viviría una de sus rutas de senderismo más multitudinarias desde su creación hace 29 años, la más antigua de cuantas se organizan en el Parque Natural Arribes del Duero con la de Vilvestre, pues ambas nacieron en 1996.
Hasta 800 personas participaban este 30 de marzo en la XXVIII Ruta de Senderismo ‘Arribes del Duero’ en Mieza, una afluencia que sobrepasaba las mejores expectativas de la organización, como señalaba el alcalde del municipio, Ismael García Carreto, durante el proceso de formalización de inscripciones.
Y esa enorme afluencia fue la causa por la que la salida se retrasaba algo más de 15 minutos según la hora programada, algo inusual en Mieza, donde la puntualidad es un gen de esta ruta. Así, tras formalizar la inscripción, cada senderista recibía el ticket para la comida y una bolsa como regalo conmemorativo de esta edición.
Pasadas las 11 de la mañana, fría y un poco ventosa, aunque en Mieza menos que un poco más arriba en los terrenos adehesados, el primero de los grupos, de unas 200 personas, tomaba dirección hacia las antiguas escuelas y cogía el viejo camino de Barruecopardo, lugar que les conduciría a las Arribes del Medio tras recorrer varios caminos como el del Molino del Tío Bonifacio, la rodera de Valdelaviña o el de las Aceñas de Pandera. Llegados al Mirador de Quintero los senderistas se darían un respiro para continuar minutos después dirección al mirador de la Peña del Águila y bordear el Picón de la Juana para terminar 11 kilómetros después, de dificultad media, en El Balcoiso, donde tendrá lugar la comida a base de carnes de cerdo a la brasa acompañadas de aceitunas y fruta, todo regado con el exquisito vino de la tierra, además de café, aguardiente y dulces típicos.
La jornada concluirá en la Plaza de Mieza con la actuación en la tarde de la Asociación Cultural Etnográfica La Arracada, de Zamora.
En las labores de coordinación cabe señalar la participación de Guardia Civil, Protección Civil de Vitigudino y Cruz roja.