Periodista, escritora y feminista, mostró el retrato real de la mujer portuguesa de mediados del siglo XX
Hacía de forma natural lo que, en aquel momento, de normal nada tenía. Al menos, no era habitual que una mujer fuese la primera de su ciudad en casarse por lo civil, o ser una de las primeras en divorciarse o en no desistir ante las presiones políticas que trataban de disuadirla en su empeño por conocer y mostrar cómo vivían las portuguesas en los años cuarenta del siglo pasado.
Periodista, escritora, traductora y activista, Maria Lamas es conocida en Portugal por su compromiso político, en defensa de los derechos de la mujer y de la democracia.
Para comprender su contribución al feminismo en Portugal y en el mundo, vamos a revisar algunos datos de su biografía.
Nacida en 1893 en Torres Novas en el seno de una familia de clase media, con 17 años se casó con un militar, siendo el primer matrimonio civil celebrado en su localidad natal. Poco después, emprendieron viaje hacia Angola, donde su marido había sido destinado.
Dos años más tarde se separa y regresa a Portugal, con una niña pequeña y embarazada de su segunda hija. Se instala en Lisboa y busca un medio de vida, encontrándolo en el periodismo, convirtiéndose en una de las primeras mujeres portuguesas en ejercerlo de forma profesional. Comienza trabajando para la Agencia Americana de Noticias y escribe en diarios lusos de renombre, como A Época, Diario de Lisboa y O Século.
En 1920 consigue el divorcio de su marido, tras años reclamándoselo, y se casa con un compañero de profesión, separándose al poco de nacer su tercera hija. De este segundo matrimonio conservará el apellido que usará el resto de su vida, Lamas, pues nunca se divorció.
A comienzos de los años treinta, acepta la dirección de ‘Modas & Bordados’, el suplemento del diario O Século, dirigido al público femenino. La orientación dada por Lamas a la publicación, abordando temas que iban más allá de los tradicionalmente considerados de interés para la mujer, hace que alcance gran éxito, transformando las pérdidas que arrastraba el semanario en ganancias.
En ese tiempo, se afilia al Consejo Nacional de las Mujeres Portuguesas (CNMP) y al Movimiento de Unidad Democrática (MUD), representando al feminismo portugués en el Congreso Internacional de las Mujeres, celebrado en Bélgica en 1946.
En enero de 1947, ya como presidenta del CNMP, cargo que la obliga a abandonar la dirección de ‘Modas & Bordados’, Maria Lamas organiza la exposición ‘Libros Escritos por Mujeres’, en la Sociedad de Bellas Artes de Lisboa. La iniciativa no gusta al régimen, que responde prohibiendo el Consejo Nacional de las Mujeres Portuguesas.
Este hecho la lleva a adentrarse en una aventura viajera, literaria, fotográfica y editorial que la condujo a la creación de la obra por la que ha pasado a la historia en Portugal.
Reclamando explicaciones por la clausura del CNMP, Maria Lamas va a hablar con el Gobernador Civil de Lisboa. Éste argumenta que la insistencia de la periodista en colocar el foco de atención sobre la mujer no está justificada y no tiene sentido mantener la organización que Lamas lidera, pues el Estado ya se ocupa de “educar y orientar” a las mujeres.
Al parecer, este encuentro es la espoleta que lanza a la periodista a materializar su misión: salir a conocer a las mujeres de su país y contárselo a Portugal en un gran reportaje, pero publicarlo poco a poco, para no llamar la atención de la censura y para poder ir financiando el proyecto con la venta de los sucesivos reportajes.
Para ello, durante tres años indaga hasta en el último rincón del país, portando una cámara de fotos, un bloc de notas y muchas preguntas. Se interesa por la mujer del interior y la del litoral, la rural y la urbana, la pobre y la rica, el ama de casa, la obrera, la campesina, la intelectual, la analfabeta, la mujer del mar…así como por su entorno físico, familiar y social.
Encuentra muchas mujeres realizando lo que en aquel tiempo se consideraba trabajo de hombre, como mineras, constructoras de carreteras, pescadoras, … También labradoras y jornaleras del campo a tiempo completo, en ausencia de marido, por emigración o fallecimiento. Muestra su empeño por contribuir a la economía familiar o por sostener ésta por completo, con una recurrente preocupación por cómo estas mujeres compaginan el trabajo diario con la crianza de los hijos, por la vertiente relacionada con su realización personal, por su felicidad… por su aceptación.
De mayo de 1948 a abril de 1950, van apareciendo fascículos, hasta un total de 15, de 32 páginas cada uno, bajo el título “As Mulheres do Meu Pais”. Un reportaje gráfico y escrito de gran calidad, que deja constancia de la cotidianidad de las mujeres portuguesas a mediados del siglo XX. Con el paso del tiempo, la obra ha adquirido un gran valor documental, sociológico y antropológico.
Contemplando los retratos pudiera parecer que Maria Lamas pretendiera mostrar la miseria de Portugal a través de las mujeres. Pero lo que desde luego consiguió es que los retratos hablasen por sí solos, en sintonía con su relato vigoroso.
Los textos, escritos desde la franqueza, la reflexión y el acercamiento libre de juicio, delatan una curiosidad sincera y personal. “El deseo de conocer, en todos sus aspectos, la vida de la mujer portuguesa, surgió en mi cerebro y en mi corazón hace muchos años. Fue cuando yo misma me encontré en la encrucijada donde es forzoso elegir un camino, y me reconocí sin preparación para la lucha, ni otra brújula que no fuese mi sinceridad y mi responsabilidad de madre”, escribe en el prólogo del libro, que dedicó “A todas las mujeres portuguesas”.
La obra está repleta de fotografías, de autoría de Lamas y de fotógrafos locales, con interesantes pies de foto, que son parte fundamental y no meramente complementaria en la obra. Incluye dibujos de Fernando Carlos y láminas de pintores notables, como Abel Manta, José Malhoa o Silva Porto.
La edición original de 1948 es de Actuális, Lda., que Maria Lamas creó junto con dos amigos para autopublicarse. En 2003 la editorial Caminho hizo una reedición en forma de facsímil, siendo hoy muy difícil conseguirla. La última edición es de 2023, realizada por A Bela e o Monstro Edições, del periódico Público, con una tirada de 3.500 ejemplares, con introducción de Ana Catarina Mendes, ministra Adjunta y de Asuntos Parlamentarios, y de Pedro Adão e Silva, ministro de Cultura.
Maria Lamas no sólo escribió “As Mulheres do Meu País” e incontables artículos de prensa, también publicó poesía, novela o libros infantiles.
Su obra literaria y periodística pasó durante muchos años desapercibida en Portugal y hoy adquiere un nuevo valor. Gran parte de sus notas, cartas personales y documentación están archivadas en la Biblioteca Nacional de Portugal.
Perseguida por la policía política, durante los años cincuenta fue encarcelada varias veces. En 1962 se exilió a París, regresando a Portugal en 1969. Tras la restauración de la democracia en 1974, recibió reconocimientos y cargos honoríficos, mientras continuó con su activismo social.
Maria Lamas murió en Lisboa en 1983, a los 90 años, tras una vida desarrollada dentro de los márgenes de la pura acción y la coherencia personal.