El candidato de Ciudadanos por Salamanca al Congreso de los Diputados analizó los resultados electorales criticando una ley electoral "que distingue entre ciudadanos de primera y de segunda"
"A pesar de esos 622 votos que nos han faltado en la provincia de Salamanca para revalidar nuestro escaño el centro político ha llegado España para quedarse". Con estas declaraciones, el candidato de Ciudadanos por Salamanca al Congreso de los Diputados, Pablo Yáñez, comparecía ante los medios de comunicación casi dos hora después de conocer el escrutinio que confirmaba que el Partido Popular de Salamanca arrebata un diputado a la formación naranja, que se queda fuera, volviendo así el bipartidismo a la ciudad: tres diputados para el Partido Popular y uno para el Partido Socialista.
A su juicio, lo que reflejan los resultados electorales es que hay 3 millones de personas que "han votado cambio y han dicho no a la corrupción y al populismo", por lo que aseguró sentirse "más orgulloso que nunca de forma parte de esta formación política". El partido de Ciudadanos en el Congreso queda compuesto por 32 diputados "que trabajarán para modificar una ley que distinga entre ciudadanos de primera y segunda". "Tenemos una ley electoral que provoca que Ciudadanos con un poco más de 200.000 votos ha sacado un escaño y el PP con algo más 600.000 votos, sólo tres veces más, haya sacado 18 escaños", añadió.
Por último, insistió en que se algo define a Ciudadanos es el "inconformismo" y agradeció a sus compañeros de partido el trabajo de los últimos meses y el apoyo personal recibido. "Muchos de vosotros estáis en los ayuntamientos, en las diputaciones o en las Cortes de Castilla y León, y ese es el sitio para impulsar lo que desde Ciudadanos hemos reclamado siempre: un cambio", concluyó.