Salamanca, la provincia que más profesores ha perdido en Castilla y León

Los denostados recortes en el sector educativo han vapuleado duramente a las plantillas del profesorado no universitario a lo largo de los últimos años. Las sucesivas jubilaciones y lo asfixiantes porcentajes de la controvertida tasa de reposición del personal docente fueron una constante desde que irrumpió la imparable crisis económicas. En el caso de Castilla y León, estas restricciones han alcanzado porcentajes realmente preocupantes. Por si fuera poco, en el ámbito específico de Salamanca, la incidencia de los recortes de disparó de forma especialmente intensa a largo del último cuatrienio.

El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (STECyL) ha desvelado esta semana, apoyándose siempre en los objetivos datos que maneja la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, unas variables muy llamativas sobre la pérdida de profesores en los centros educativos públicos de la provincia salmantina, que despuntan de una forma muy negativa en comparación con la tendencia, también sombría, contabilizada en el conjunto de Castilla y León. Según esta enumeración estadística, Salamanca lidera de forma palpable la disminución de profesorado en los centros de rango público de nuestra región. No en vano, entre diciembre del año 2010 y diciembre de 2014, Castilla y León vio cómo el profesorado de los centros de titularidad pública de las enseñanzas no universitarias descendió en un 5,4%, pasando de los 28.423 docentes censados en los comicios sindicales de hace cinco años a los 26.874 computados en el último mes de la pasada anualidad, lo que se traduce, numéricamente, en 1.549 profesores menos en la región.

Sin embargo,Salamanca se encaminó durante el citado periodo por la senda más frustrante y funesta, con una caída total en las plantillas docentes de sus centros públicos de nada más y nada menos que un 9,6% (376 profesores), muy por encima de la media regional (el citado 5,4%). A una distancia claramente alejada de Salamanca, pero exteriorizando también un panorama nada halagüeño, se situó la vecina provincia de Zamora, donde sus centros educativos públicos del tejido no universitario vieron menguadas sus dotaciones de profesores en un 8%, cayendo de los 2.371 contabilizados en diciembre de 2010 a los 2.182 censados a finales de 2014. En el tercer peldaño de este decepcionante 'ranking' se aposentó León, con un descenso del 5,4%, pisándole los talones Soria, con un bajada del 5,1%.

El resto de la tabla regional arroja en el quinto lugar a Palencia, con una disminución de 4,9%, Valladolid (4,4%), Ávila (4,2%), Burgos (3,6%) y Segovia (3,2%).Estos guarismos, según enfatiza el sindicato, se basan en dígitos del censo de las elecciones sindicales del profesorado en los centros públicos. Todo ello se acompañó con una clara tendencia a la interinidad y a la precariedad en el empleo. Por si fuera poco, las limitaciones a las ofertas de empleo público solo han permitido convocar 441 plazas de los cuerpos de Secundaria en la última remesa (50 de la oferta de empleo público de 2014 y 391 de 2015), de las que se han cubierto únicamente 396.

Más interinos

La consecuencia directa de todo lo anterior es que «este curso se ha vuelto a incrementar en casi dos puntos porcentuales el ya elevadísimo porcentaje de interinidad en las plantillas docentes», según especifica el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza. En términos regionales, el número de profesores interinos ocupando vacantes sigue creciendo y se sitúa ya, aproximadamente, en los 3.400 a jornada completa, con 1.600 maestros y 1.800 docentes en el nivel de Secundaria. Porcentualmente, el porcentaje de interinos sobre el total del profesorado en los centros públicos de la Comunidad sobrepasa ya el 25% en Secundaria y el 15% en Maestros, Sumando ambos cuerpos, oscila en torno al 20%.

Con vistas a la próxima anualidad, las perspectivas tampoco incitan al optimismo, según el particular diagnóstico del STECyL. A su juicio, la oferta de empleo docente prevista en Castilla y León para 2016 ?unas 600 plazas para el escalafón de maestros? resulta totalmente «insuficiente», lo que le incita a reclamar al Ministerio de Educación la desaparición de «estas limitaciones» y a pedir a la Consejería de Educación de la Junta «un programa pluarianual de convocatorias amplias y negociadas» que permitan «consolidar el empleo al profesorado interino que viene trabajando curso tras curso y sacar plazas para los nuevos titulados».

Fuente El Norte de Castilla