Equo exige la gestión pública de los comedores escolares y auditorías de las concesionarias

El partido Equo ha pedido que se recupere la gestión pública en los comedores escolares, al tiempo que ha denunciado los perjuicios que, desde su punto de vista, tiene la denominada línea fría, es decir, el servicio de comida precocinada que se está extendiendo por los centros educativos de la Comunidad y que, afirman, "no es seguro porque pasan 21 días hasta que se consume la comida y el número de puntos críticos es mucho mayor".

"Exigimos a la Junta de Castilla y León las auditorías externas de las empresas que operan en Salamanca, que rompa el contrato con la causante de gusanos en comidas de escolares en la región", manifestaba Marta Santos, una de las portavoces de esta formación.

En el mismo sentido, Santos argumentaba que "se condena a unos niños a comer comida recalentada durante nueve años, por lo que le pediría al señor Jesús Laborda (director provincial de Educación) que comiera unos huevos fritos de hace 21 días, porque no queremos que nuestros hijos se alimenten con comida enlatada y hecha hace 21 días".

Por su parte, Alejandro Martínez, también portavoz de Equo, recordaba que el citado director provincial de Educación dijo que la implantación de la línea fría quedaba suspendida de manera cautelar, pero "los padres quieren un documento escrito, ya que, a la vez que se anunciaba esta paralización, a Miranda del Castañar llegaba un horno para recalentar y a La Alberca un lote de pan congelado, cuando se nos decía que este producto se iba a comprar en los pueblos y reciente".

Los portavoces de Equo aseguran que con el mismo presupuesto se pueden ofrecer productos locales y ecológicos, a través de un servicio público adaptado al medio rural y que genera empleo. En la provincia hay más de 60 comedores escolares.