La Plaza Mayor siempre será un ágora

Estos días se ha estado hablando mucho sobre las funciones de la Plaza Mayor a cuenta de la feria del libro.

Obviamente el turismo hoy en día, es quizá la función más importante de la Plaza, no solo económicamente sino también en cuanto a ocupación de tiempo y de espacio.

Tenemos la inmensa suerte de tener una de las plazas más bonitas del mundo y la gente hace muchos kilómetros para venir a verla. Y las personas que no vienen directamente a verla, sino a ver las otras joyas de las que disponemos, pueden irse sin ver algún otro monumento, pero sin ver la Plaza Mayor no. La Plaza Mayor es un paso obligado.

Y también es paso obligado para las personas que vivimos aquí? ¿no os pasa a veces que cuando lleváis muchos días sin ir, como que te falta algo? A mí sí. Y más en verano: no me puedo pasar sin tomarme una leche helada de La Polar en cualquiera de sus terrazas.

Pero eso es además de sus otras funciones. Todavía me acuerdo de cuando la llamábamos "el tontódromo", no hace tanto tiempo. Lo de "ir a dar una vuelta a plaza" no se decía en sentido figurado, es que de verdad se daba una vuelta a la plaza y otra y otra? normalmente en un caminito imaginario situado entre las terrazas y los bancos.

La Plaza Mayor siempre fue un centro de encuentro. Allí los domingos te encontrabas con la gente de tu edad, con tus padres y sus amigos,? y con un poco de suerte te encontrabas con tus tíos y te daban un duro o dos de "propina", que siempre venía bien.

Además, algunos días de diario por las mañanas, se veían gentes de distintos gremios haciendo negocios, sobre todo ganaderos.

Es cierto que ha cambiado mucho: con los cambios en la manera de relacionarnos, también han cambiado los usos de la Plaza Mayor, pero sigue siendo nuestra ágora, nuestro centro de encuentro, seguimos quedando "debajo del reloj"? Y seguimos haciendo manifestaciones, tanto de alegría, como cuando gana el Avenida, como de reivindicación como el 8M.

Pues estas dos cosas se van a juntar este viernes.

Primero, a las 19:00 la marcha para exigir a los gobiernos medidas contra el cambio climático. Y después, a las 20:00 la fiesta de la democracia, la fiesta de fin de campaña de la candidatura del cambio.

Y las dos cosas se celebran en la Plaza para que todo el mundo se sienta invitado.

Y cuando se acaben las dos cosas, aún quedará gente en la Plaza celebrando su fiesta particular, porque no deja de ser viernes, y no dejamos de estar en una ciudad universitaria. Y si el tiempo acompaña como corresponde al mes de mayo, estarán las terrazas abarrotadas.

Y así debe ser.