Aseguran que "el desamparo de la administración central, vemos el desprecio que ha hecho permanentemente"
La situación de los actuales y repetitivos ataques de lobo en la provincia de Salamanca, ha sido tema de debate en la Salamaq'24, que se celebra en el Recinto Ferial de Salamanca.
En una rueda de prensa organizada por COAG, y que ha contado con la presencia e intervención de José Manuel Cortés, presidente de COAG Salamanca; Rubén Lorenzo, ganadero de ovino y vocal de la mesa de ovino de la lonja; y Cristian Hernández, técnico de COAG Salamanca, se ha abordado esta situación que cada vez preocupa más.
"Entendemos que el lobo, que la oveja es un sector muy esclavo, están desapareciendo cientos de explotaciones de ovino y no entendemos por qué no se le muestra apoyo y un poco más de cariño y un reconocimiento en la labor que están haciendo, no solo al medio ambiente si no que son una herramienta de extinción de incendios, una herramienta de asentar población en el medio rural y no entendemos por qué está en comprensión de la sociedad que se ponga de parte del lobo y no se ponga de parte del ganadero".
Por ello, aseguran que "el desamparo de la administración central, vemos el desprecio que ha hecho permanentemente el administrador de transición ecológica y reto demográfico, doña Teresa Rivera, y el desprecio de la administración central es que encima la premia con proponerla para comisario europea. Nos preocupa muchísimo estas intenciones que no son nada buenas, legislando y atentando contra el sector agrario", aseguran.
"La situación en muchas de las explotaciones de Castilla y León, afectadas por la problemática de la gestión y conservación del lobo, está llegando a ser insostenible y desesperante para los ganaderos. No es de extraño que cada vez haya menos ganaderías, es que precisamente lo que se está consiguiendo es poner en peligro la extinción nuestras ganaderías. Cabe destacar que en Castilla y León se alberga una de las mayores poblaciones de lobos y por tanto los ataques están aumentando año tras año y el ritmo se ve acrecentado desde la protección del lobo en el 2021 con su inclusión en el listado de especies silvestres en régimen de protección especial, o bien el ESPER".
En la actualidad se disponen de los datos del censo "y determinan que en Castilla y León había 179 manadas, 152 al norte del río Duero y 27 al sur del río Duero. Esto supone el 60% de la población en toda Castilla y León, y se dió lugar a que comprobaron que había otras 35 manadas lo que supone aumentar estas cifras hasta los 114. Con esto podemos ver que si hubo una manada compuesta entre 8 y 9 lobos tenemos en torno, por lo menos en esas fechas, cuando el censo, se tenía entre 1700 y 2000 ejemplares. A día de hoy se está elaborando otro censo, entre 2022 y 2023, que esperemos sea el reflejo de la situación que estamos viviendo se va a llegar a tener una superpoblación de este animal".