Los adjudicatarios están teniendo que buscar soluciones provisionales en otros lugares
Los adjudicatarios en régimen de alquiler de las viviendas que ha reformado la Junta de Castilla y León (a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León, el Somacyl) en el antiguo Parque de Obras Públicas de Ciudad Rodrigo se las prometían muy felices cuando el pasado 27 de marzo recibieron por fin las llaves de sus nuevos hogares, ya que en principio eso significaba que podían entrar a vivir en las mismas (les habían dicho que les darían las llaves cuando estuvieran totalmente listas).
Aunque realmente sí que pueden empezar a vivir allí (ya que tienen las llaves), el problema es que recibieron las viviendas sin que estuviesen operativas ni el agua caliente ni la calefacción (que es comunitaria), situación que se mantiene semana y media después, sin que sepan cuándo se va a solventar la deficiencia.
La situación está generando un tremendo trastorno a los adjudicatarios, por el 'limbo' en el que se encuentran, con mudanzas hechas o a medio hacer, y buscando soluciones provisionales, como residir en casas de familiares los que tienen la oportunidad (para poder acceder a estas viviendas, no se puede poseer ninguna otra, por lo que la mayoría vivía de alquiler, que han ido dejando, especialmente con la conclusión del mes de marzo).
En al menos un caso, no les ha quedado más remedio que trasladarse ya a la vivienda adjudicada, pese a tener esos dos grandes hándicaps. A todos los adjudicatarios les han comunicado desde la Junta que hasta que no se solucionen las deficiencias y por fin las viviendas sean plenamente óptimas para vivir, no les van a empezar a cobrar el alquiler pero, como apuntan, eso no soluciona la situación personal que están viviendo estos días.
Hay que recordar que a estos adjudicatarios ya les fueron 'dando largas' en torno al momento en que podrían empezar a vivir en sus nuevos hogares (les fueron retrasando varias semanas la entrega, sin precisarles el momento definitivo hasta 'el día antes'), por lo que la sorpresa de la falta de agua caliente y calefacción ha sido aún mayor, ya que esperaban no encontrarse con el más mínimo problema.