La pista de arena de la Plaza Mayor fue escenario de un espectáculo de fusión ecuestre
La cancelación del Campeonato de Castilla y León de Equitación de Trabajo debido a un bajo número de inscritos ha provocado que se esté viviendo una Feria del Caballo distinta a la cual iba a tener lugar, con un programa ligeramente más corto, pese a lo cual está habiendo un buen ambiente, como ocurrió en la mañana sabatina, en la que hizo acto de presencia la lluvia.
En concreto, a eso de las 12.30 horas, empezó a caer una lluvia fina, que no tuvo demasiadas consecuencias porque apenas duró 3-4 minutos, salvo por el hecho de que, como todavía no habían empezado las exhibiciones programadas para media hora antes en el foso izquierdo de la Rúa del Sol, parte del público se marchó, a sus casas o en busca de refugio en la bóveda de la Puerta del Sol o en alguna carpa (algunos espectadores tenían paraguas, pero muy pocos).
Justo tras ese episodio de lluvia (hubo otro a la hora de comer) ya comenzó por fin la exhibición en la pista de competición, que fue doble, una a cargo del jinete profesional David Simón, y acto seguido una de doma vaquera de mano de Jeray Valentí. Especialmente antes y después de esa exhibición tuvieron un trasiego continuo los puestos de artesanía y alimentación montados en el Paseo Fernando Arrabal, que para algunos sirvieron de ‘mercadillo sabatino’ ante la no celebración de éste al estar ocupada la zona.
Junto a la doble exhibición de la pista de competición, el otro gran componente de la mañana del sábado fue el espectáculo que hubo a última hora de la mañana en la pista de arena de la Plaza Mayor. Este espectáculo de fusión ecuestre, con caballistas y bailaoras, corrió a cargo de la Compañía Flamenco El Romero, congregando bastantes espectadores en un tramo de la jornada en la que principalmente lució el sol.