La celebración en la Catedral de Santa María fue presidida por el Obispo José Luis Retana
Como todos los días, a las 11.00 horas de la mañana del viernes se ofició una eucaristía en la Catedral de Santa María de Ciudad Rodrigo, que en esta ocasión fue mucho más especial de lo habitual, con motivo de la aparición en el calendario litúrgico de la festividad de San Isidoro de Sevilla, patrón de la Diócesis Civitatense, que estuvo ‘presente’ a través de una pequeña figura en la mesa del altar.
Con el objetivo de festejar al patrón, el Obispo José Luis Retana había hecho un llamamiento a toda la Diócesis a asistir a una solemne misa en su recuerdo, dándose cita en la Catedral un amplio número de sacerdotes, así como más fieles de lo habitual en estas misas diarias en la Seo, entre ellos trabajadores de la Diócesis, responsables de delegaciones diocesanas, o religiosas, además de los ediles del Ayuntamiento Ramón Sastre y Víctor Gómez.
Como apuntó Retana durante su homilía, la intención es que quede instaurada la celebración de San Isidoro de Sevilla (“he querido celebrarlo y lo haré en el futuro”), de quién resaltó que es Doctor de la Iglesia. Asimismo, para que esta celebración “no pase ni pena ni gloria”, quiso remarcar que el patrón de la Diócesis fue “un ejemplo de firmeza en la fe”.
Como publicamos el jueves, el patronazgo de San Isidoro hacia la Diócesis Civitatense tiene su origen en la 2ª mitad del siglo XII, cuando San Isidoro anunció a un canónigo de la Colegiata de San Isidoro de León que Ciudad Rodrigo iba a ser invadida por las tropas musulmanas, ante lo cual el canónigo se trasladó a Benavente para informar de la situación a Fernando II de León, quién se encaminó con sus tropas a defender a Ciudad Rodrigo de la invasión.