El ciclista sufrió un fatal accidente el pasado día tres de noviembre en el cual perdió la vida
Son las diez de la mañana de un domingo, la zona de 'El Árbol Gordo' se llena de grupos de ciclistas para disfrutar de una mañana pedaleando por carreteras comarcales para mantener la forma física y recrearse con los paisajes que da la socampana mirobrigense.
Pero algo cambia en esta última mañana, faltan dos cosas muy importantes en el deporte comunitario, la alegría en las caras y un compañero.
Más de un centenar de ciclistas se unieron en el dolor y se dirigieron en grupo recorriendo los 12 kilómetros donde se encontraba el lugar donde el pasado viernes día 3 de noviembre su compañero de salidas, José Guillermo Monroy, sufrió un fatídico accidente en el que falleció días después tras luchar intensamente por su vida.
Un golpe de aire que le hizo caer de su bicicleta dándose un fuerte golpe en la cabeza, esa es la causa más probable después de varias investigaciones al circular ese día en solitario.
La afición ciclista mirobrigense hizo una para en el kilómetro 311,800 de la N/620 (entre Sancti Spíritus y El Salto) a la que acompañaban familiares de José Guillermo y un coche fúnebre cargado de ramos y coronas de flores que durante estos días de duelo han ido llegando junto al féretro mostrando el cariño hacia el ciclista.
Justo en el lugar de la caída del aficionado a la bicicleta, se colocaron todas las flores y el Maillot que José utilizaba con mayor asiduidad. Todo esto bajo la atenta mirada de sus familiares, hijos y esposa, manteniendo esta en brazos la urna con las cenizas del ciclista.
Su hijo, Eduardo Monroy, dedicó unas palabras de agradecimiento al más del centenar de deportistas y compañeros de su padre que acudieron al homenaje, animando a todos a seguir practicando el ciclismo y extremar la precaución en la carretera. Estando seguro de que su padre irá siempre pedaleando junto a todos ellos.