Los Reyes Magos visitarán las residencias de ancianos, pero los niños no podrán besarles en la Plaza Mayor como medida de prevención
Siguiendo la tradición, el Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo (salvo Vanesa Muriel) visitó en el tramo final de la tarde del jueves a los Amigos de la Ilusión, a falta exactamente de una semana para que Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente recorran las calles mirobrigenses en las carrozas que les están preparando con mucho mimo.
Como es habitual, la temática de esas carrozas será secreta hasta la misma tarde del jueves 5 de enero, esperando un año más los Amigos de la Ilusión que sorprendan a los mirobrigenses de todas las edades que saldrán a las calles en esa tarde mágica, animando el alcalde Marcos Iglesias, durante su visita a la nave situada en el Paseo de Carmelitas (junto a la Escuela Infantil), a “vivir el día de Reyes”.
Durante la visita, Iglesias señaló que el Ayuntamiento está “muy satisfecho”, porque incluso en los dos años previos, con la pandemia de por medio, se pudo dar la bienvenida a los Reyes Magos (en 2021, estuvieron sentados toda la tarde en la Plazuela del Conde para que todo el que quisiese pasase a saludarles, mientras que en 2022 hubo Cabalgata normal, pero sin parada final en la Plaza Mayor).
Este año, según apuntó el alcalde, será por fin “la Cabalgata de la normalidad”, salvo por las obras de la Avenida de España, que obligan a alterar notablemente el recorrido. Dentro de esa vuelta a la normalidad, los Magos visitarán varias residencias de ancianos antes de la Cabalgata, y llevarán a cabo la habitual recepción en la Plaza Mayor a los niños que quieran saludarles. Eso sí, como medida de prevención, los Magos no llegarán a coger a los niños, que tampoco podrán besarles (sí se podrán acercar al lado suyo y sacarse fotos).
Durante la visita, se incidió en que los Amigos de la Ilusión “hacen mucho con muy poco”, reivindicando algunos de ellos un incremento en la contribución económica del Consistorio. El Equipo de Gobierno llevó hasta la nave un hornazo, del que dieron buena cuenta mientras brindaban con vino y cerveza junto a los Amigos de la Ilusión, quienes enseguida se pusieron de nuevo manos a la obra. Por cierto, que a diferencia de lo que era ‘tradición’, la buena temperatura exterior hace que este año los Amigos de la Ilusión estén pasando escaso frío en la nave.