La mañana se remató con un flashmob en uno de los patios del Claustro del Seminario
El Seminario Diocesano San Cayetano de Ciudad Rodrigo abrió sus puertas en la mañana del lunes a todos los niños que decidieron sumarse -en una jornada laborable pero no lectiva - al regreso tras la pandemia del coronavirus de Holywins, la iniciativa de la Iglesia Católica para celebrar la vida (la traducción literal sería La Santidad vence), en contraposición al ambiente tenebroso de la festividad de Halloween que precisamente también se conmemora este lunes.
Un año más, la celebración de Holywins estuvo organizada por la Delegación de Misiones de la Diócesis, y las parroquias de El Salvador y San Cristóbal de Ciudad Rodrigo, que propusieron un ramillete de variadas actividades al centenar de niños que se acercaron hasta el Seminario, una cifra inferior a la última vez que se había podido hacer en 2019 (cuando hubo 150 chavales), pero superior a la de 2018, cuando hubo 90 (la asistencia depende mucho de cómo caiga exactamente en el calendario).
Este 6º Holywins en Ciudad Rodrigo comenzó con la reunión de todos los asistentes (parte de los cuales acudieron disfrazados de motivos religiosos o de superhéroes) en la Capilla del Seminario Diocesano, donde les dio la bienvenida el Obispo de la Diócesis, José Luis Retana, quién también se acercó a última hora de la mañana para presenciar, e incluso tomar parte, en el flashmob con la canción Free Fall que se estuvo preparando en uno de los seis talleres por los que fueron rotando los chavales.
En lo que respecta a los otros talleres, hubo uno de manualidades donde cada asistente creó un rosario misionero; otro donde se diseñó un photocall (con el cual los chavales se sacaron fotos además de lucirlo en el flashmob final); uno de cocina donde hicieron trufas; otro de catequesis en forma de Trivial de los Santos; y uno último en el que cada chaval creó su propio ‘cespedín’, llenando de tierra un calcetín en el que plantaron unas semillas. En medio de la mañana, hubo un parón en esa rotación por los talleres para tomar algo.
Inicialmente, estaba previsto culminar Holywins 2022 a las puertas del Seminario (cuya fachada estaba decorada para que todo el mundo supiese lo que se estaba celebrando en el interior), pero la lluvia que estaba cayendo obligó a realizar el flashmob final en uno de los patios del Claustro del edificio, como se puede ver en el vídeo que aparece más abajo. A su finalización, el Obispo impartió la bendición final, antes de recoger los asistentes todo lo que habían hecho: el rosario, las trufas y su cespedín.