Han intervenido en un total de 9 procesiones: 5 en Ciudad Rodrigo, 3 en San Vicente de Alcántara y 1 en Ávila
La procesión del Resucitado en Ciudad Rodrigo contó con el acompañamiento musical de la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía de Jesús Nazareno, que con esta salida ‘en casa’ cerró su ajetreada Semana Santa 2022, en la que han participado en un total de 9 procesiones en tres lugares diferentes: Miróbriga, San Vicente de Alcántara (Badajoz) y Ávila, interpretando una media de 20 marchas por desfile, según señalan desde la agrupación.
La Banda comenzó su Semana Santa en Ciudad Rodrigo, tocando el Viernes de Dolores en la procesión de La Dolorosa de su propia Cofradía. El Domingo de Ramos, se desplazaron por primera vez hasta San Vicente de Alcántara, para acompañar en la Procesión de Ramos a la Hermandad Infantil de la Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén, Jesús Resucitado y Santísimo Sacramento.
El Martes Santo, regresaron a esa localidad, para acompañar a la Agrupación Parroquial del Santísimo Cristo de la Flagelación y Nuestra Señora del Rosario. Pernoctando en San Vicente de Alcántara (en un albergue cedido por el Ayuntamiento), el Miércoles Santo procesionaron con la Antigua y Fervorosa Cofradía de Jesús Nazareno, Santo Entierro, Virgen de los Ángeles y Ecce Homo.
De vuelta a Ciudad Rodrigo, en la mañana del Jueves Santo participaron en la larga procesión del Paso a la Agonía de su propia Cofradía antes de poner rumbo a Ávila, para formar parte de la Procesión de los Pasos de la capital abulense, que corre a cargo del Real e Ilustre Patronato de la Santa Vera Cruz (los dos vídeos que aparecen al final del texto pertenecen a su participación en esta procesión).
El Viernes Santo, también hicieron doblete, en este caso en Ciudad Rodrigo, tocando por la mañana en la procesión del Santo Encuentro y por la tarde en la del Santo Entierro (La Carrera). Después de descansar el Sábado Santo, completaron como decíamos al principio sus actuaciones en la mañana del Domingo de Resurrección en Ciudad Rodrigo, interviniendo en la procesión del Resucitado de su propia Cofradía.