La Alianza lamenta que sigue habiendo un enorme desfase en el precio entre el origen y el destino de los productos agrícolas
La Alianza UPA-COAG ha mantenido una reunión con la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) en la que ha insistido en sus reivindicaciones en relación a la problemática de riegos acontecida en la pasada campaña.
En primer lugar, han solicitado a CHD que se muestre lo suficientemente sensible con los agricultores sancionados en toda la demarcación de la cuenca por haber hecho uso del riego en sus parcelas para poder rotar pero sin haber excedido las dotaciones de agua de sus concesiones. De no mostrarse flexibilidad por parte del organismo de cuenca muchos agricultores estarían viendo seriamente comprometida su viabilidad pues a las pérdidas de rentabilidad que han tenido que asumir en la producción de sus cultivos se sumarían las cuantiosas sanciones que se verían obligados a afrontar.
Por otro lado, y en esta misma línea de facilitar el riego de parcelas limítrofes sin sobrepasar las dotaciones individuales globales concedidas para poder llevar a cabo una adecuada rotación de cultivos tal cual exige la buena práctica agronómica y determinadas normativas PAC, demandamos de CHD la habilitación de un procedimiento sencillo para que mediante comunicación del agricultor este pueda utilizar el límite de su concesión en las parcelas de su explotación, de forma puntual, durante un período concreto.
Por último, y en sintonía con el posicionamiento de nuestra organización en relación con el Pacto Nacional del Agua, y al contrario que otras organizaciones agrarias que ante el próximo procedimiento de evaluación de representatividad de las OPAs previsto para el 11 de febrero han cambiado su discurso, desde la Alianza UPA-COAG insistimos en nuestra reivindicación tradicional: se precisa una adecuada regulación de la Cuenca del Duero que permita un desarrollo sostenible para asegurar el futuro de la agricultura de regadío, lo que entre otras cosas pasa imprescindiblemente por el incremento de la capacidad de almacenamiento mediante la construcción de nuevas infraestructuras (embalses, balsas de regulación, etc.).
La Alianza UPA-COAG hace un llamamiento a la responsabilidad del organismo para que demuestre su buena voluntad y sea flexible a la hora de aceptar nuestras propuestas que no afectan ni a las masas de agua ni al medio ambiente, y que por el contrario responden al objetivo y necesidad de que la actividad agraria de Castilla y León sea competitiva y no dañe económicamente los intereses de los profesionales del sector agrario.
La alianza lamenta la diferencia de precios entre origen y destino
La Alianza UPA-COAG denuncia que aún siendo conscientes de que Navidad es una época muy proclive a que suban los precios, sin embargo el año 2018 ha empezado con los mismos problemas que se vienen denunciando desde hace tiempo por la organización agraria sobre el disparatado diferencial de precios agroalimentarios entre el origen y destino.
Lejos de que en este avanzado mes de enero se hayan reducido las diferencias entre lo que perciben los agricultores y pagan los consumidores por productos de primera necesidad, el Observatorio de Precios que elabora todas las semanas la Alianza UPA-COAG y la Unión de Consumidores (UCE) de Castilla y León desde hace años detecta que a mediados de este mes las diferencias, en algunos casos, van más allá del 800 % (ver tabla adjunta).
La Alianza UPA-COAG denuncia el vergonzoso desfase que hay entre lo que perciben los profesionales agrarios y lo que se paga en una superficie comercial, y el escaso interés que existe entre algunos eslabones de la cadena agroalimentaria, y del propio Gobierno regional, porque exista información completa y transparente al respecto.
Nuestra organización recuerda que el denominado Observatorio de Precios Agrario de Castilla y León puesto en marcha por la Junta de Castilla y León hace apenas cuatro meses tiene trampa, puesto que no recoge los precios en destino, no dota de transparencia a la cadena de valor, y omite los porcentajes de beneficio cada vez más abusivos que se lleva la Industria y la Distribución con los productos agrícolas y ganaderos.
El fin con el se creó esta herramienta de trabajo, según definieron los responsables de la Consejería de Agricultura, era mantener el equilibrio entre todos los eslabones de la cadena de valor, pero la realidad es que ni aporta equilibrio como se demuestra con los porcentajes que denuncia la agrupación, y tampoco aporta información transparente a la sociedad sobre lo que ocurre a día de hoy en la elaboración del precio en los mercados.
La Alianza UPA-COAG no parará hasta que se aborde de una vez por todas el problema de precios justos que no perciben los agricultores y ganaderos, puesto que es éste uno de los motivos por los que aumenta cada vez más el abandono de activos agrarios y se acrecienta el despoblamiento rural en nuestra región.