Los salmantinos, como cada 1 de noviembre, han acudido desde primera hora de la mañana a los cementerios para rezar y depositar flores -ramos, coronas, centros...- a los seres queridos. Con numerosos puestos ambulantes en las inmediaciones del cementerio San Carlos y medidas especiales de tráfico en la zona hasta este jeuves, se trata de una de las jornadas con mayor significado religioso y de recuerdo para los que ya no están.
Medidas especiales de seguridad:
- A las entradas situadas en la plaza del Cementerio y en la glorieta del Obispo Bobadilla (nueva puerta principal) únicamente pueden acceder los vehículos de servicio público (taxis), carga y descarga, servicios fúnebres y aquellos que transporten personas impedidas (estos últimos sólo pueden acceder, pero en ningún caso estacionar).
- Es recomendable la utilización de los nuevos accesos al Cementerio desde la carretera de Ledesma, avenida de Carmen Martín Gaite y glorieta del Obispo Bobadilla, donde se encuentra la puerta principal de acceso al camposanto.
- Se recomienda la utilización de los nuevos estacionamientos del acceso oeste (avenidas de Fernando Pessoa y Luis de Camoens) y de las zonas residenciales próximas a la necrópolis (barrio de Huerta Otea y nuevos polígonos de Pizarrales).
- Se prohíbe el aparcamiento de vehículos en el recinto y los viales de entrada y salida (avenida Luis de Camoens) de la gasolinera situada en el acceso oeste a la N-620, junto a la tapia del Cementerio.
- Los puestos de flores, churros y roscas estarán ubicados en las avenidas de Alfonso XI (habilitándose un carril para el estacionamiento de las furgonetas de los vendedores en dirección a la glorieta de San Marcelino de Champagnat) y del Obispo Sancho de Castilla.
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Fotos: Alejandro López