La superficie de olivar en la Comunidad ha crecido un 15 % en la última década
Dentro del compromiso de incorporar 5.000 jóvenes al campo en el horizonte 2020, en los últimos 3 años la Junta de Castilla y León ha apoyado un total de 89 expedientes en incorporación y modernización para cultivos de olivar y frutos de cáscara, con un apoyo público de 2,9 millones de euros y una inversión inducida de 4,7 millones. Precisamente, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha subrayado la importante evolución de la superficie de olivar en la Comunidad, donde ha crecido un 15 % en la última década, pasando de 7.147 a 8.243 hectáreas, con una producción total cercana a las 15.000 toneladas, en su visita a la plantación y almazara del Grupo Valdecuevas, en Medina de Rioseco.
Es especialmente relevante el 238 % de aumento en la provincia de Valladolid (donde ha pasado de 305 a 1.030 hectáreas), convirtiéndose en la tercera provincia en superficie de olivar en Castilla y León, tras Ávila (3.842 hectáreas) y Salamanca (3.000), mientras en Zamora se contabilizan 360 hectáreas.
Además, para seguir afianzando este objetivo, la Consejería de Agricultura y Ganadería va a implantar el Programa Agrotutor Joven, consistente en un nuevo servicio de tutorización personalizada integral que abarcará la etapa previa de formación, la elaboración y puesta en marcha del plan de empresa y que continuará posteriormente hasta la consolidación de la actividad empresarial. Para ello, se fomenta la incorporación a entidades asociativas que aseguren una vía de comercialización de las producciones y den el soporte de gestión y el apoyo financiero necesario tanto para explotaciones de nueva creación, como para empresas agroalimentarias.
Asimismo, está prevista la puesta en marcha de un nuevo programa Agrobecas +50, para especializar en centros de excelencia nacional o internacional a los profesionales. El objetivo es que jóvenes universitarios puedan optar a formación especializada, en centros de excelencia nacional o internacional, en aquellas materias, disciplinas y tecnologías innovadoras que ya emergen con una demanda creciente de profesionales en el sector agroindustrial de la Comunidad y con el compromiso de su incorporación laboral en industrias agroalimentarias castellanas y leonesas una vez finalizada la formación.
Ayudas a la I+i agroalimentaria
En cuanto al nuevo modelo de I+i Agroalimentaria 2016-2020, se incluye una línea prioritaria que investiga la adaptación y evaluación agronómica de nuevas especies en la Comunidad y su adaptación a los escenarios previstos como consecuencia del cambio climático. Para ello, la Consejería de Agricultura y Ganadería, a través del ITACyL, y en coordinación con universidades y centros tecnológicos, evalúa nuevos materiales vegetales para ponerlos a disposición del sector productor, junto a sus recomendaciones agronómicas.
Junto al olivo, otro ejemplo de diversificación agraria son los frutos secos. Castilla y León cuenta con grandes áreas cuyas características son aptas para su cultivo, especialmente pistacho, almendro y nogal, a lo que se añaden unas previsiones de rentabilidad elevadas.