CIUDAD RODRIGO | La tarde festiva en el Centro de Día de Personas Mayores también incluyó una actuación de su Rondalla
Con una semana de adelanto respecto a la fecha habitual (el miércoles previo al Carnaval, que este año será San Blas), el Centro de Día de Personas Mayores de Ciudad Rodrigo vivió en la tarde del miércoles su pregón preCarnavalero, que este año tuvo además el honor de abrir el ciclo que se desarrollará en la ciudad hasta el Viernes de Carnaval.
El pregón corrió a cargo de una de las caras más habituales del Centro de Día, Hipólita Martín Maíllo, que fue presentada por la gerente de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León en Salamanca, Isabel Fernández Cambon, quién destacó de la pregonera su pasión por el folclore y por el bordado, y su participación activa en la vida del Centro. Isabel Fernández animó al resto de asistentes a que hagan lo mismo.
Poli Martín empezó el pregón recordando sus orígenes familiares, motivo por el cual también lució un traje de zagalejo, habitual en la Sierra de Francia, de donde procedían sus padres (concretamente, eran de Mogarraz). Tras una primera canción, la pregonera explicó que fue su madre quién le inculcó el gusto por las labores y las canciones, evocando a continuación varios "recuerdos y añoranzas" de su infancia, que pasó en la calle San Cristóbal.
En este punto, recordó varios juegos, como las tabas o el gua, y otros momentos como cuando iban a comprar al carro de Ramona, o los conciertos de la Banda de Música los domingos en el templete del Parque de La Glorieta.
Tras cantar otra canción de su "cosecha", sobre el Centro de Día de Personas Mayores, hizo un profundo repaso a antiguos oficios que "le daban vida a esta ciudad". Así, recordó (con varias historias y anécdotas incluidas) a herreros, hojalateros, tallistas, colchoneros, herradores, cesteros, alpargateros, curtidores, o cencerreros, sector en el que trabajó su marido, Santiago Risueño durante 45 años en un taller en la Avenida Conde de Foxá. Según indicó la pregonera, su marido y sus tres hijos son "lo mejor que me ha pasado en mi vida".
A continuación, se pasó a un bloque del pregón más 'filosófico', en el que Poli Martín hizo un análisis de las palabras Hogar y Mayores por las que se conoce popularmente al Centro de Día. Respecto a Hogar, destacó todo lo que se aprende en él: "todos tenemos algo que aportar", y las relaciones que se establecen: "si tienes amigos, y te reúnes con ellos en el Hogar, tienes una gran familia".
Mientras, a partir de la palabra Mayores, hizo una reivindicación de este colectivo, expresando que "lo importante es la edad que siento". De igual modo cree que "ahora nos interesa ser nosotros mismos y alegrarnos del camino andado", pidiendo a todos los presentes que "sigamos disfrutando de todo lo que nos queda de vida".
Como cierre, y tras proclamar el Carnaval de Ciudad Rodrigo como el mejor de toda España, cantó un par de coplillas carnavaleras, acompañada de dos miembros de la Rondalla del Centro de Día, que le hicieron varias veces la ola. Para concluir, lanzó vivas a Ciudad Rodrigo y al Carnaval.
Isabel Fernández Cambon hizo entrega a Poli Martín de un obsequio de parte del Consejo del Centro antes de que la Rondalla pasara a ocupar el espacio principal para ofrecer un recital.