San Isidro inicia en El Puente su ronda de bendiciones con la compañía de pocos fieles
El mayordomo de la celebración fue Justo Iglesias Blanco, y además se hizo un reconocimiento a Ángel Castaño López
El Arrabal del Puente de Ciudad Rodrigo fue escenario en la mañana del domingo ?al tratarse del domingo más cercano a la jornada en la que aparece la festividad en el calendario- de la primera de las celebraciones en honor a San Isidro Labrador que tendrán lugar en Miróbriga y su comarca en los próximos días (como en el barrio de San Andrés de Ciudad Rodrigo, en Carpio de Azaba, o en el agregado de Águeda).
La celebración de este año en el Arrabal mirobrigense ha sido la primera tras la jubilación eclesiástica del que fue párroco del barrio, Domingo Peinado, estando presidida en su lugar la celebración eclesiástica por el Vicario General de la Diócesis Civitatense, Tomás Muñoz Porras, quién en primer lugar ofició una eucaristía en la Iglesia de Santa Marina.
A su conclusión, llegó la hora de procesionar a San Isidro por las calles del barrio, en una comitiva con pocos fieles abierta por el estandarte de la Cofradía, seguido por el mayordomo de este año, Justo Iglesias Blanco, y por el tamborilero Sergio Montero 'El Manterito de El Bodón'; la imagen del Santo, y tras la misma Tomás Muñoz Porras y el presidente de las Cofradías del barrio, José Manuel Jerez; y los concejales Joaquín Pellicer, Marcos Iglesias y Jesús Sánchez Agudo.
Como es habitual, la procesión ?supervisada por una patrulla de la Policía Local- llegó hasta la confluencia de la calle Álamo Grande con la calle Clemente Velasco, donde Tomás Muñoz Porras procedió a bendecir los campos. Finalizada esa bendición, se regresó a la Parroquia, todo ello a un muy buen ritmo.
Finalizada la parte eclesiástica, los presentes se dirigieron hasta el Centro Parroquial, para disfrutar de un vino español. En el transcurso del mismo, llegó la hora de que la Cofradía del Santísimo, San Antón y San Isidro Labrador homenajease a dos de sus cofrades más antiguos, Ángel Castaño López y Santiago Calamote González. Al acto solo acudió el primero de ellos, Ángel Castaño, que recibió un obsequio, antes de comenzar a degustar las viandas preparadas.