Miércoles, 24 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Canciones y claveles para un 25 de abril
X
PORTUGAL , 45 AÑOS DE LA REVOLUCIÓN DE LOS CLAVELES

Canciones y claveles para un 25 de abril

Actualizado 25/04/2019
Raquel Martín-Garay

Multitud de actos conmemoran el espíritu y los valores con los que se vivió la 'Revolución de los Claveles' el 25 de abril de 1974

El 25 de abril es festivo en Portugal. Es el 'Día de la Libertad' y se celebran actos conmemorativos por todo el país, tanto en las instituciones, como en la calle. Se recuerda aquel 25 de abril de 1974, en que el ejército se sublevó contra el gobierno, poniendo fin a un régimen que había durado más de cuarenta años, dirigido por António de Oliveira Salazar.

En Portugal no se pasó de una dictadura conservadora a una democracia a través de una reforma, mediante un proceso de transición, como sucedió en España entre 1976 y 1977, sino que se hizo con una ruptura. Lo sucedido el 25 de abril dio paso a dos años de agitación social, en los que los portugueses salieron a las calles a manifestarse y durante los cuales se sucedieron hasta seis gobiernos provisionales y dos presidentes de la República y que concluyó con la entrada en vigor de la Constitución de 25 de abril de 1976. Una revolución sostenida en el tiempo, que se inició en la madrugada de un 25 de abril. Aunque todo había comenzado mucho antes?

Canciones y claveles para un 25 de abril   | Imagen 1El descontento del ejército por la incapacidad del gobierno para dar solución a las guerras coloniales que se mantenían en África desde principios de los años sesenta, unido a los problemas económicos derivados de la crisis del petróleo en 1973 y 1974, provocó un proceso de transformación dentro de las Fuerzas Armadas portuguesas.

Todo había comenzado por los generales. El general Costa Gomes estaba al mando de las tropas en Angola, el general Kaúlza de Arriaga, en Mozambique y António de Spínola, en Guinea-Bissau. Los tres fueron empoderados por Marcelo Caetano, presidente del Consejo de Ministros desde 1968, después de que Salazar se viese incapacitado para gobernar aquejado por graves problemas de salud.

El ejército estaba molesto con el régimen, después de más de una década de guerra colonial con las que entonces se llamaban 'provincias portuguesas de ultramar'. La guerra de guerrillas estaba desmoralizando a las tropas portuguesas, que veían inevitable un reconocimiento de independencia de esos territorios africanos, que pusiese fin al conflicto armado.

Un cantautor portugués, José Afonso, -también conocido como Zeca Afonso-, había compuesto casi una década antes la canción que fue santo y seña para la revolución del día 25 de abril de 1974. José Afonso era uno de los autores vigilados de cerca por el régimen, ya que se le consideraba un agitador político. El 17 de mayo de 1964 dio un concierto en la Sociedade Musical Fraternidade Operaria Grandolense, en la villa alentejana de Grândola, con un público formado por campesinos y trabajadores del corcho, entre los que había muchos comunistas. El autor ha contado muchas veces como, inspirado por los sentimientos de unión y de ansia de libertad y cultura que allí sintió, escribió la canción "Grândola Vila Morena" durante el viaje de regreso a Lisboa aquella noche, como homenaje a esas gentes. En 1971 la grabó en Francia, incluida en su álbum Cantigas de Maio y, sorprendentemente, pasó la censura.

El 29 de marzo de 1974 Zeca Afonso participó en un concierto en el Coliseo de Lisboa, durante el cual interpretó "Grândola Vila Morena". A este concierto asistían varios jóvenes militares implicados en la organización de la sublevación que acabaría por materializarse el 25 de abril de ese año. Emocionados por las estrofas de la canción, decidieron elegirla como señal con la que todo daría comienzo.

Con la colaboración de dos locutores de radio, João Paulo Diniz, de Emisores Asociados de Lisboa (EAL) y de Leite de Vasconcelos, de Radio Renascença (RR), se ideó la estrategia radiofónica de señales que formó parte de las operaciones militares para la madrugada del 25 de abril. Habría dos señales, la primera a las 22h55 del día 24 y, la segunda, entre las 00h00 y la 01h00 del 25 de abril.

Se acordó que la primera señal fuese la canción "E Depois do Adeus", interpretada por Paulo de Carvalho, que había ganado el Festival RTP de la Canción el 7 de marzo y había sido elegida como canción para representar a Portugal en el Festival de Eurovisión de ese año 1974. Se trataba de algo más que una canción ligera, su letra contenía frases extraídas de las cartas que el autor, José Niza, escribía a su mujer desde Angola, donde estaba destinado como muchos otros jóvenes portugueses, reclamados por el estado para combatir en la guerra. "O que faço aqui?", "Quem me abandonou?" son algunas de las significativas estrofas de la canción.

Poco antes de las once de esa noche del 24 de abril, los capitanes de la Escuela de Práctica de Caballería (EPC) de Santarem encendieron sus transistores. Puntualmente, según lo previsto, en la EAL sonó "E Depois do Adeus". Comenzaba así la operación Fim Regime (Fin Régimen) a desarrollar durante el Día D (25 de abril de 1974).

Canciones y claveles para un 25 de abril   | Imagen 2Canciones y claveles para un 25 de abril   | Imagen 3El capitán Salgueiro Maia era uno de esos jóvenes militares que estaba pendiente de la radio. La segunda señal para avanzar hacia Lisboa, según la estrategia militar preparada, era la canción "Grândola Vila Morena", que se escuchó, tal y como se esperaba, durante la primera hora de la madrugada de aquel 25 de abril. Sonó en el programa Limite, de Radio Renascença, después de que el locutor, Leite de Vasconcelos, leyera unas estrofas de la canción: "Grândola Vila Morena/ Terra de fraternidade/ O povo é quem mais ordena/ Dentro de ti, ó cidade/". Eran las 00h20 y ese era el segundo aviso que indicaba que todo estaba en orden y la operación Fim Regime se ponía en marcha.

Al inicio de Grândola Vila Morena, percibimos unos pasos que parecen tropas desfilando, pero según contó Zeca Afonso tiempo después, la intención no era la de simular soldados marchando sino la de recrear el ambiente producido al interpretar el emotivo 'cante alentejano', hoy reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. No fue hasta tiempo después del 25 de abril cuando Zeca Afonso se dio cuenta que su canción había quedado para siempre unida al movimiento revolucionario.

Nos situamos en la madrugada del 25 de abril de 1974. El capitán Salgueiro Maia dirige el Escuadrón de Instrucción del Regimiento de Caballería de Santarem. De los 800 hombres que lo componen, solo 240 podrán marchar hacia Lisboa. Hacia las 03h00 se ponen en camino. A las 03h59 toman la RTP (Radio y Televisión Portuguesa) en Lisboa. A las 05h45 están ya en el Terreiro do Paço, en el corazón de la Baixa lisboeta. El presidente del Consejo de Ministros, Marcelo Caetano, se refugia en el cuartel do Carmo, junto con los ministros de Asuntos Exteriores e Información y Turismo.

Canciones y claveles para un 25 de abril   | Imagen 4Hay una calma aparente, pero la actividad no cesa. Las tropas leales al régimen no abren fuego contra los sublevados, desobedeciendo así el mandato de sus superiores jerárquicos. Tampoco los conjurados. A primera hora de la mañana se suceden las rendiciones militares, siempre mediante el diálogo, posicionándose al lado de los sublevados.

Hacia el mediodía las tropas al mando de Salgueiro Maia atraviesan el centro de Lisboa: la rua Augusta, el Rossio y la rua do Carmo. Una multitud en ambiente de fiesta acompaña y rodea los tanques militares subiendo por el Chiado. Parece ser que fue una florista la primera en colocar un clavel en el fusil de un soldado. Este gesto se multiplicó y la imagen de fusiles y claveles dio la vuelta al mundo, por lo que se la denominó 'Revolución de los Claveles'. Hubo muchos 'fotógrafos de abril', de cuyo objetivo surgieron esas imágenes, hoy icónicas.

Al llegar al Largo do Carmo, la gente ofrece comida, café y cigarrillos a los soldados. A pesar de la incertidumbre, pues al principio no se sabía si el golpe promovía el fascismo o la democracia, los lisboetas salen en masa a la calle, auto-integrándose así en una revolución militar, que enseguida percibieron como democrática. El capitán Salgueiro Maia da dos ultimátum a Marcelo Caetano para que se rinda. Son momentos de máxima tensión, se escuchan varias ráfagas de ametralladora. Finalmente, el presidente del Consejo de Ministros accede a negociar.

Hacia las 16h30 la policía política del régimen, -la PIDE-, abre fuego sobre la multitud que se concentra frente a su sede en la calle António Maria Cardoso, provocando cuatro muertos y varios heridos. Según se sabrá después, éstas son las únicas víctimas que producirá esta revolución.

A las 17h15 el general António de Spínola recibe el poder de manos de Marcelo Caetano. La población comienza a cantar espontáneamente el himno nacional en la plaza do Carmo donde se ubica el cuartel militar. Se negocia la salida del ya ex-presidente del Consejo de Ministros, primero, hacia Madeira, después a Brasil, donde vivirá exiliado hasta su muerte en 1980.

A la 01h20 del día 26 de abril se proclama la Junta de Salvación Nacional. Durante ese día el batallón de Caballería patrulla las calles de Lisboa, regresando a su cuartel de Santarem a última hora de la tarde sin incidentes.

Canciones y claveles para un 25 de abril   | Imagen 5La 'revolución' fue desarrollada por unos jóvenes militares, los Capitanes de Abril, como se les llamó, título elegido por la actriz y directora portuguesa Maria de Medeiros para su película sobre este hecho histórico.

Se consiguió derrocar un régimen que había durado medio siglo en apenas unas horas y con un balance de cuatro civiles muertos y cuarenta y cinco heridos que no fueron causados por los sublevados. Ello fue posible por el camino recorrido previamente, tanto por la sociedad civil, como por las fuerzas armadas. Cambios culturales, cambios sociales e incumplimiento de uno de los mayores principios de la vida militar, la obediencia jerárquica.

Los jóvenes capitanes que la protagonizaron, desobedeciendo a sus superiores durante esas horas decisivas, hicieron posible que la sublevación prosperase. "Ahora sé que hay momentos en que la única solución es desobedecer", es una frase que se atribuye al capitán Salgueiro Maia. La adhesión paulatina de los militares leales al régimen y el acompañamiento en masa de la sociedad civil hizo que la revolución fuese imparable.

Esta es una de las particularidades de la Revolución de Abril, por lo que el día de hoy es celebrado en Portugal como la Fiesta de la Democracia.

Con el eslogan '25 de Abril Sempre!' que aparece este día en manifestaciones y otros actos celebrados en la calle, se quiere evocar el espíritu de fraternidad, alegría y confianza en la democracia que se vivió ese día y que hizo que los valores del 25 de abril sean recordados 45 años después.

En los meses siguientes a la Revolución de los Claveles, meses de gran agitación social, en que los gobiernos se sucedían y la democracia estaba en ciernes y sin ninguna garantía, Grândola Vila Morena fue cantada durante las movilizaciones en la calle, tanto en los momentos de júbilo como en los de incertidumbre. La canción trascendió la sonoridad de las palabras y la música y se convirtió en un símbolo, quedando arraigada en la memoria emocional colectiva del pueblo portugués.

Fotografías de Eduardo Gageiro y de otros autores desconocidos

Comentarios...