Unicaja Banco prepara su salida a Bolsa, que será en julio

La esperada 'ventana de oportunidad' para la salida a bolsa de Unicaja Banco ha llegado y lo hace en una coyuntura de revalorización bursátil del sector financiero español donde el Popular figura como única Gran incertidumbre. La entidad malagueña, que inició en marzo el proceso interno para convertirse en empresa cotizada, comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el denominado 'Intention to Float', que representa el penúltimo paso marcado en el calendario previsto antes del día 'd' del debut bursátil. La documentación refleja el compromiso firme de salida a bolsa, un hecho que ?descartado el verano para este tipo de operaciones- debe producirse en la primera quincena de julio.

El objetivo de la salida a bolsa prevista inicialmente para antes de enero de 2017 y para el que las autoridades comunitarias concedieron a la entidad que preside Manuel Azuaga un aplazamiento cara a una coyuntura más favorable, es captar capital mediante una Oferta Pública de Suscripción (OPS) sobre un total de 625 millones de nuevas acciones, el 40 por ciento del capital actual de la entidad. Se trata de una ampliación dirigida exclusivamente a inversores institucionales, bancos incluidos, sin derecho a suscripción preferente por parte de los actuales accionistas y en el que la entidad tiene potestad para suscribir un diez por ciento adicional una vez conocida la cotización. Se intensifica partir de ahora un tiempo de prospección exhaustiva entre posibles inversores interesados para poder fijar el precio inicial de la acción, clave para el éxito de la operación y también para delimitar el peso de la fundación Unicaja como principal accionista, que habrá de quedar en el entorno del 50 por ciento. Con la ampliación de capital se obtendrá capital para la devolución obligada de los 602 millones con los que el FROB apoyó la operación de absorción de Banco CEISS en 2013.

Durante el mes que se inicia se llevará a cabo lo que se conoce como 'book building', un proceso en el que la entidad va recibiendo ofertas futuras o propuestas de compra de sus acciones por parte de inversores. El administrador del 'libro' debe apuntar todas las órdenes que cumplan con los criterios definidos por el emisor. La información recopilada en esta fase será clave para la fijación del precio inicial de las acciones de Unicaja Banco, cuyo valor contable se estima en 3.100 millones

Durante la primera quincena de junio, el trabajo de prospección de potenciales inversores, el denominado sindicato colocador ( las entidades que ayudan a Unicaja en la operación, (lideradas por Rothschild) elaborará informes para su presentación en visitas a inversores institucionales nacionales y, sobre todo, internacionales en un momento en que el sector financiero español representa una buena opción cara al nuevo escenario de subida de tipos que se prevé para 2018. Ese primer 'roadshow' de perfil más técnico tendrá continuidad en la segunda quincena cuando los propios directivos de la entidad mantendrán contactos con los responsables de fondos de inversión y de pensiones ?entre otros posibles inversores? para mostrarles la oportunidad de acudir a la ampliación de capital de una entidad mediana muy atractiva por diversos indicadores.

Así, el banco malagueño, con sus 3,1 millones de clientes en Andalucía y Castilla y León, es uno de los mejor capitalizados del sistema. Su cobertura del 55 por ciento sobre activos tóxicos (créditos morosos e inmuebles adjudicados) le otorga una buena posición, así como la ratio de préstamos sobre depósitos que es del 83 por ciento. La salida a bolsa permitirá mejorar también la futura cuenta de resultados de la entidad, toda vez que el interés anual del 10 por ciento por los bonos convertibles de la participación del Frob detraía unos 60 millones anuales de la cuenta de resultados. La obtención de capital permitirá también destinar un volumen similar para la compra del 20 por ciento que el Frob tenía en Banco CEISS, con lo que Unicaja se convertirá en único accionista