Jueves, 18 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Los árboles mueren de pie
X

Los árboles mueren de pie

Actualizado 30/01/2016
Ana G. P.

[Img #314188]Inicié hace tiempo mi colaboración en este medio con el agradecimiento al director por dejar que mis palabras se colaran un poco en la vida de quienes navegan por este digital.

Supongo que tiene lógica explicar el porqué del título de estas líneas, los motivos del nombre que le he dado a este espacio.

Los árboles mueren de pie es una obra de teatro de Alejandro Casona (1903 ? 1965) que leí en mi adolescencia, a los 12 ó 13 años. Nunca la he visto representada sobre el escenario de un teatro pero la esencia de la obra y el significado de la frase que le da título sí las he visto "vividas" y encarnadas en las historias concretas de otros personajes así como experimentadas en primera persona.

Los árboles mueren de pie es un canto a nuestra existencia, a la magia de existir; a todas aquellas personas que siempre están de pie, como un gran árbol, sin importar que por dentro, en su interior, se sientan carcomidas o rotas, pues sus raíces siempre están alimentándose de esperanzas, de recuerdos, de aquello en lo que creen y les alienta el espíritu, aunque la tierra en la que les corresponde crecer a veces sea tan inhóspita y estéril.

Por casualidad, esta entrada ve la luz en un tiempo en el que los escaparates de las tiendas, las calles, las casas y los lugares de trabajo se van llenando de árboles ? naturales o artificiales y de una especie concreta, sí, pero árboles al fin ? que nos empeñamos en recargar de luces y adornos igual que muchas veces nos recubrimos de capas y complementos que desdibujan la esencia de lo que somos (nuestras calles salmantinas también están adornadas desde hace ya unos cuantos días); y en un momento vital en el que hay muchos árboles de pie, rostros y vidas concretas que sobreviven a la hostilidad y la conflagración de las crisis de todo tipo que corroen nuestra vida más cotidiana.

Espero que esta pueda ser la superficie de contraste donde poder reflejar que merece la pena vivir viviendo, ser siendo, amar sintiendo, hablar pensando? y no vivir en el sueño, sintiendo de modo prefabricado, expresando afecto tasado y medido, y combinando el silencio y la palabra de una manera estudiada y sibilina, ¡tan fría! aunque a veces, VIVIR en mayúsculas implique equivocarse, romperse, ensuciarse? y levantarse de nuevo y que por cruda que sea nuestra realidad, nuestra persona? es mucho mejor que una farsa controlada.

No son pocas las veces en que los medios nos muestran esas imágenes grises, esa tristeza vital, los árboles caídos, quebrados, tronchados irremediablemente bajo el peso de nuestra realidad comprometida? como si del dolor, la muerte, o la destrucción no se pudiese construir nada bueno. Yo quiero creer que otra existencia es posible, que se puede mirar de otro modo la realidad que nos rodea, que se puede vivir de otra manera, con una savia que no se agota: la esperanza (bajo todos los nombres y formas que se le puedan dar).

Porque los árboles que mueren de pie engendran vida, están abiertos a la esperanza de regenerarse y de reinventarse que reciben de sus raíces bien hendidas en la tierra que tarde o temprano les hará brotar. Sólo pueden vivir y morir de pie los que permanecen dispuestos a no desconocer ni obviar su naturaleza humana, y yo apuesto, mi vida y este espacio, por una experiencia aterrizada, hundida y enraizada. Porque los árboles que mueren de pie vacíos (de sí mismos) por dentro, pero firmemente anclados, acogen vida en su vaciado interior, en la profundidad de sus ramas, cobijan, abrazan... Y siempre, por aquél árbol de pie en que murió una vida para engendrar la Vida.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.

Comentarios...