Jueves, 28 de marzo de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
Pandemia o política
X

Pandemia o política

Actualizado 29/01/2021
Juan Robles

Hay macho tema para hablar en torno a la pandemia y la política

Pandemia o política | Imagen 1La verdad es que estoy ya cansado de hablar casi sólo de la dichosa pandemia. Pero es que en los medios y hasta en las tertulias privadas no se habla prácticamente de otra cosa más que de la malhadada pandemia. Así que no me queda más remedio que seguir hablando de la misma.

En este momento, en vísperas del comienzo de la campaña para las elecciones en Cataluña, es imprescindible hablar de ello. Más aún si el tema de la fecha está cuestionado y en manos de los tribunales de justicia. Y más también si algunas autoridades catalanas proclaman el desconfinamiento para poder asistir a los mítines políticos.

Como si se le pudiera pedir permiso al virus para poder llevar adelante la campaña. Estamos hartos de escuchar locuras en lo que se refiere al tratamiento de la pandemia. Además de que pareciera que la pandemia es diferente según la comunidad autónoma de que se trate o el partido político que tenga la responsabilidad de tomar las correspondientes decisiones.

Como vemos, hay macho tema para hablar en torno a la pandemia y la política. Y todo son discusiones en cuanto al cierre de establecimientos o al confinamiento en determinadas poblaciones; que no en comunidades enteras, y mucho menos en el entero país, ya que el gobierno central no quiere tomar las provisiones que lo permitan.

Se discutió en su momento si podrían retrasarse las elecciones gallegas y vascas. Y se pudo hacer porque se pusieron de acuerdo todos los partidos interesados y pudieron intervenir los respectivos presidentes, mientras que en Cataluña en estos momentos no hay presidente que pueda determinar el cambio de fecha de las elecciones. Algunos partidos, mayoritarios en su parlamento, decidieron que habría que retrasarlas hasta el 30 de mayo.

Pero no todos los partidos están de acuerdo en el asunto de las elecciones catalanas, y de hecho han recurrido a la justicia. Se espera que pronto se dicte la sentencia y sepamos todos a qué atenernos, aunque a unos u otros no les guste. Esperemos que todos acepten el veredicto de la justicia y se obre en consecuencia.

Bien discutido ha sido el caso del ministro de sanidad saliente, Salvador Illa, debido a haber estado tratando de compatibilizar el ejercicio del ministerio en momentos de máxima expresión pandémica, con el hecho de ser el candidato a presidente de la Generalidad catalana, parece que por el tirón que tiene su persona en Cataluña, lo que le daría ventaja al partido socialista a la hora de las elecciones.

Los ministerios ya se ajustaron. Y no es fácil prever si nos va a ir mejor o peor con la nueva ministra. Lo que sí parece es que el separatismo catalán y sus intereses parecen quedar reforzados con la introducción del otro ministro catalán, el señor Iceta.

Y sigue coleando el tema de si indulto sí o indulto no para los políticos encarcelados, y cuándo sería el momento más ventajoso para aquellos que tienen que tomar la decisión de tan anómala acción de alcance político, jurídico y de otras imprevisibles consecuencias. El acercamiento de los presos al país vasco es otro de los asuntos discutidos, pero que concurren a la permanencia del gobierno de España.

La reclamación está también en el ambiente acerca de si el presidente del gobierno o los ministros correspondientes tienen que dar razón de su gestión sobre el asunto de la pandemia en el Congreso de los Diputados.

Y la discusión llega también a la oportunidad o el modo de presentar en el Congreso, aprovechando la ocasión excepcional de la normativa pandémica, para aprobar sin discusión leyes como la de la enseñanza o la de la eutanasia.

Y no se ven libres de la discusión política los hechos llamativos de saltarse los protocolos de vacunación por parte de varios personajes influyentes.

Mientras tanto, quedan al margen las consideraciones sobre la gravísima situación económica, que está dejando en la calle y en la más estricta miseria a multitud de personas y familias que no tienen ningún auxilio de ayuda básica para poder seguir sobreviviendo.

Y el endeudamiento del país crece y crece. Y el producto interior bruto se desmorona. Y las correcciones y planes que hay que preparar para poder recibir las ayudas de los fondos europeos, siguen esperando y durmiendo el sueño de los justos. A pesar de los avisos de la propia Unión Europea y de importantes organismos internacionales.

Mientras tanto, no se ve ni el más mínimo intento de conseguir un acuerdo básico de unidad de acción entre los grandes partidos nacionales para afrontar juntos la gravísima crisis económica y social que se nos avecina.

Lo que sí parece es que, mientras la pandemia crece y crece, se aumentan los miedos, se multiplican los hospitalizados, y las muertes se siguen disparando. Por eso, para muchos no queda más remedio que mirar hacia lo alto y promover campañas de oración, a la espera de una solución más normalizada.

Pandemia, política, oración? a ver si encontramos algún tipo de salida, normal o extraordinaria, para afrontar las graves consecuencias de la situación que estamos viviendo.

La empresa Diario de Salamanca S.L, No nos hacemos responsables de ninguna de las informaciones, opiniones y conceptos que se emitan o publiquen, por los columnistas que en su sección de opinión realizan su intervención, así como de la imagen que los mismos envían.

Serán única y exclusivamente responsable el columnista que haga uso de nuestros servicios y enlaces.

La publicación por SALAMANCARTVALDIA de los artículos de opinión no implica la existencia de relación alguna entre nuestra empresa y columnista, como tampoco la aceptación y aprobación por nuestra parte de los contenidos, siendo su el interviniente el único responsable de los mismos.

En este sentido, si tiene conocimiento efectivo de la ilicitud de las opiniones o imágenes utilizadas por alguno de ellos, agradeceremos que nos lo comunique inmediatamente para que procedamos a deshabilitar el enlace de acceso a la misma.