Dedicación y paciencia

¿Qué razones puede haber para querer cargarse la Sanidad Pública?

¿Cómo es posible que nos quedemos impasibles ante tanta mezquindad y abuso?

¿Cómo es posible que a sabiendas del sufrimiento que padecen muchos enfermos, no haya un poquito de humanidad?

El Nobel portugués Saramago nos decía, "se está preparando un mundo solo para ricos".

Escucho la intervención de la procuradora de PODEMOS en la Junta de Castilla y León, Isabel Muñoz, y me siento angustiado cuando le cuenta al Consejero de Sanidad cómo una señora la había llamado para ver si ella podía hacer algo por su hija, para que le hicieran una resonancia magnética, porque lleva esperando muchos meses y con una enfermedad de columna que la tiene inválida y comida por los dolores.

Esta madre ha tenido que dejar su trabajo para poder atender a su hija, cuando por desgracia los ingresos de esta familia son mínimos, y dirigiéndose al Consejero de Sanidad le dice ¿Sabe usted cual es el trabajo de esta madre que se ha visto obligada a dejar? "es un trabajo de media jornada en hostelería, pero de 14 horas de trabajo diarias".

Sr. Consejero, esto no es catastrofismo, esto es por desgracia la vida real, por eso nos duele la Sanidad Pública a sus magníficos profesionales y a los pacientes, pues siempre hemos presumido de tener el mejor sistema sanitario del mundo, por su alta eficacia y su bajo coste, siendo un modelo para otros países, por eso me duele el maltrato a que están siendo sometidos los profesionales de la Sanidad Pública y los pacientes.

No hay derecho a que se quiera privatizar por este Gobierno nuestra Sanidad Pública que es un derecho fundamental, pero están como buitres esperando la presa para engordar sus cuentas bancarias sin pensar en los ciudadanos, pero eso sí, se pueden rescatar bancos que nos han costado más de sesenta mil millones de ?, o autopistas, ahí no tienen dudas, para ellos eso es lo primero en lugar de los ciudadanos.

Y luego llaman extremistas, radicales y anti-sistemas, a quienes defendemos la Sanidad Pública, pues bien señores del Gobierno, les diré quiénes son para mí los extremistas, radicales y anti-sistemas: son extremistas los que lideran la corrupción, radicales los que han destruido el estado del bienestar, anti-sistemas los que reformaron el artículo 135 de la Constitución.

Es un ataque a la Sanidad Pública cuando hay menos sanitarios de los que se necesitan, cuando se empuja a la gente hacia la sanidad privada, cuando se hace una externalización, cuando se generan listas de espera, que no es una cuestión puntual o coyuntural, es una estrategia para derivar dinero a la sanidad privada, y esto es también un ataque a la Sanidad Pública.

No se puede tardar como ocurre en algunos hospitales, más de doscientos días para una prueba de cáncer de mama.

Está claro que la gestión de la Consejería de Sanidad es muy deficiente, ¿aprenderemos algún día? ¿Sabremos usar nuestra fuerza que es el voto, para acabar con tanto descalabro?

En definitiva, si se mantiene la Sanidad Pública, es gracias a la dedicación de los profesionales y a la paciencia de los pacientes.