San Juan y la Virgen de la Esperanza caminan arropados por los más jóvenes
La cofradía de la Cruz y del Amor cuenta con 150 cofrades y está respaldada por la experiencia de 30 años de historia
La cofradía de la Cruz y del Amor disfrutó de su gran noche, la del Miércoles Santo con una procesión que este año cambió su itinerario pero se mantuvo fiel a sus simbolos y tradiciones. La procesión partió de la iglesia de San Juan y transcurrió por las calles Arco, Edades del Hombre, Puerta del Río, Padre Cámara, y finalizado en la Plaza de Santa Teresa.
Llegada la procesión a la altura de la Iglesia de San Pedro, los dos pasos que portaba la cofradía; San Juan Evangelista y Virgen de la Esperanza, al igual que todos los cofrades, se giraron hacía la iglesia y realizaron una reverencia como parroquia del pueblo que son. El otro momento significativo fue la finalización de la procesión en la Plaza de Santa Teresa, donde los cofrades se retiraron el caperuzo, dejando a la vista su rostro. Asimismo, realizaron una reverencia al paso de la Virgen de la Esperanza y pasaron por debajo de las andas de la imagen de San Juan Evangelista.
Una cofradía con casi treinta años de historia
Esta cofradía fue fundada en 1988 por un grupo de jóvenes apoyados por el antiguo párroco albense y actual vicario general de la Diócesis de Salamanca, Florentino Gutiérrez. Se declara en sus estatutos fiel seguidora de la Iglesia Católica y como consecuencia de ello, tratará de impulsar toda realidad que contribuya al pleno reconocimiento y realización de la persona humana.
En la actualidad su junta directiva está formada por su Presidenta; Beatriz Briñón, Vicepresidente; Raúl de Arriba, Secretario; Isaac Santos, Tesorera; Sofía Durán, y tres vocales; Jorge Jiménez, María Nieto y Ainara de Sales. Se encuentra abierta a todos los públicos, previo pago de una inscripción de 10 euros anuales, los cuales son destinados a sufragar gastos internos de la propia cofradía.