Todos los años celebramos la Navidad en familia los afortunados. Pretendemos estar en Formigal esquiando el jueves día uno.
El primer deseo es que mis hijas y toda la familia tengan salud y puedan ir cumpliendo sus sueños.
Para el equipo de la Fundación Mil Caminos Santiago Uno tener el acierto para abrir las mejores oportunidades para las niñas y niños de protección. No poner excusas con las leyes y las burocracias alienantes. Saber bordear las injusticias y expandir nuevas estrategias para vencer las desigualdades.
Quiero que las niñas de protección se empoderen y crean en ellas mismas. Año tras año vemos talento perdido por no sentirse bien queridas. Tienen derecho a que se las quiera bien, que ser dependientes emocionales no sea un problema para ellas.
La frivolidad de las personas buenas impide generar cambios sociales. Deseo que seamos menos egoístas y basemos nuestro bienestar en compartir los privilegios y luchar junto a los desfavorecidos sin hablar por ellos.
Deseo la coherencia en las religiones y en las ideologías que dominan el mundo. Me resulta increíble que las conciencias permitan tal hipocresía entre las palabras y las acciones globales. Buscamos certezas a la hora de comprometernos y asumir riesgos en decisiones que afectan a demasiadas personas e infancia.
Me gustaría aumentar mi Fe para tener mayor seguridad en la influencia diaria que tenemos sobre la vida de los demás. Aprender a vivir mejor en familia y convivir con facilidad teniendo empatía con los que nos rodean y regalarles nuestra mejor versión.
Aumentar las risas y el sentido del humor como herramienta para esparcir la felicidad. Estar serios y ser pesimistas no deja el mundo mejor de lo que lo que lo hemos encontrado.
No podemos dejarnos caer por la debilidad y pido fortaleza para generar soluciones allí donde se necesiten. Muchas personas con enfermedades han demostrado que la mayoría de los límites nos los ponemos nosotros.
Deseo que las ambiciones sean solidarias y poder llegar al corazón de los que tienen poder para cambiar el mundo que somos todos y cada uno. Deseo que haya pandemias de justicia e igualdad de oportunidades .
Deseo no ser una mercancía al servicio de poderosos sin escrúpulos que se benefician de guerras y catástrofes naturales. Deseo volver a creer que otro mundo es posible y yo puedo aportar mi granito de arena con los desfavorecidos de la sociedad en familia.