UPS Salamanca advierte de las graves consecuencias que tendría para el sector vacuno provincial debido a la competencia desleal y las diferencias sanitarias.
La organización agraria UPA Salamanca ha manifestado este viernes su satisfacción ante la decisión de la Unión Europea de posponer la firma del acuerdo comercial con Mercosur. Desde la entidad consideran esta paralización como una noticia positiva y directa consecuencia de las presiones ejercidas por el sector, incluyendo las protestas del campo celebradas ayer en Bruselas, donde la organización estuvo presente.
A pesar del alivio momentáneo, UPA ha lamentado la postura mantenida por España en las negociaciones. La organización critica que el Gobierno español no haya seguido la senda de países como Francia, Italia y Polonia, naciones que han liderado la negativa a firmar el tratado para exigir mayores salvaguardas a sus respectivos sectores agrarios. En este sentido, la entidad ha calificado la posición española como una "traición al campo español" en un momento de especial delicadeza para el sector.
Impacto directo en la provincia de Salamanca
La preocupación de la organización se centra especialmente en los efectos que este tratado tendría sobre la economía provincial. Según UPA, Salamanca, que cuenta con un fuerte sector de vacuno, tiene "mucho que perder" si el acuerdo llega a materializarse en los términos actuales. La organización sostiene que la entrada de productos sudamericanos sería "muy lesiva" para el sector primario local.
El sindicato agrario argumenta que el campo español atraviesa una situación crítica, agravada por crisis recientes como la aparición de la Peste Porcina Africana (PPA) en España. Por ello, insisten en que permitir la entrada masiva de productos de Mercosur sin las debidas cláusulas espejo supondría un golpe definitivo para muchas explotaciones.
Competencia desleal y diferencias sanitarias
El argumento central de UPA Salamanca para oponerse al tratado radica en la imposibilidad de competir en igualdad de condiciones. La organización denuncia que el sistema productivo de los países de Mercosur no cumple con las estrictas normativas que la Unión Europea impone a sus ganaderos y agricultores.
Entre las diferencias más notables, UPA destaca:
"Las palabras de los gobernantes europeos se pueden adornar como se quiera, pero lo cierto es que nuestro sector primario no competirá en igualdad de condiciones", señalan desde la organización, añadiendo que a estas desventajas se suman las exigencias europeas en materia de bienestar animal y huella de carbono. Para UPA, la firma del acuerdo tal y como se plantea sería "un clavo más en el ataúd" del sector productivo local.