Una iniciativa cultural y gastronómica hispano-lusa que se extiende hasta el 8 de diciembre
La música de cámara sonará este sábado, 29 de noviembre, en un escenario singular como es la catedral de Miranda do Douro (Portugal). El Quinteto de Metales de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León (OSCyL) ofrecerá un concierto gratuito a las 17:00 horas (hora portuguesa) como parte de la programación cultural de las jornadas 'Cruzando La Raya'.
La actuación musical del sábado 29, titulada ‘Cruzando La Raya. Música en la Frontera’, se enmarca en las II Jornadas ‘Cruzando La Raya. Sabores de la Frontera’. Se trata de un evento cultural, gastronómico y turístico organizado conjuntamente por la Junta de Castilla y León y las regiones Norte y Centro de Portugal para dar valor al patrimonio compartido, que se viene desarrollando durante todo el mes de noviembre y se extenderá hasta el próximo 8 de diciembre, en la que participan seis restaurantes de la provincia de Salamanca y la localidad salmantina de Aldeadávila de la Ribera con una exposición etnográfica.
El concierto será de entrada libre hasta completar el aforo, ofreciendo una oportunidad para disfrutar de la música en un entorno histórico.
El Quinteto de Metales de la OSCyL, fundado en 1991, está formado por los trompetistas Roberto Bodí y Víctor Teresa, el trompista Martín Naveira, el trombonista Robert Blossom y el tubista José Redondo. Este grupo de cámara cuenta con una trayectoria ininterrumpida de treinta y cuatro años en la que ha actuado en numerosos escenarios de prestigio.
El repertorio que ofrecerán en Miranda de Douro se desarrollará en dos partes. En la primera, los asistentes podrán escuchar la 'Marcha Triunfal' de Héctor Berlioz, 'Canciones' de Juan del Enzina y el 'Quinteto nº 1' de Víctor Ewald. La segunda parte del programa incluirá piezas como 'Un americano en París' de G. Gershwin, 'Fiesta Gitana en el Sacromonte' de E. Cebrián, 'La Verbena de la Paloma' de Tomás Bretón y el 'Libertango' de A. Piazzola.
Las II Jornadas 'Cruzando La Raya' constituyen una excelente oportunidad para descubrir la riqueza cultural, arquitectónica y culinaria de la frontera. Dentro de su vertiente gastronómica, participan un total de 36 restaurantes portugueses y españoles de La Raya, que ofrecen menús basados en recetas tradicionales.
De los establecimientos participantes, 22 son españoles, 6 de la provincia de Salamanca y 16 de la de Zamora. Los 14 restantes se ubican en diferentes localidades de Portugal. Esta iniciativa gastronómica se prolongará hasta el 8 de diciembre.
La oferta cultural se completa con la exposición 'Cruzando la Raya. Etnografía de la Frontera'. La muestra puede visitarse en la ermita de San Sebastián, en la localidad salmantina de Aldeadávila de la Ribera, y permanecerá abierta al público hasta el 11 de enero de 2026.
La exposición reúne objetos de la vida cotidiana y festiva, con especial atención a las capas de honras y atuendos de mascaradas tradicionales. Las piezas han sido cedidas por la Colección particular Carmen Granado, la Asociación Cultural el Pulijón, la Cámara Municipal de Miranda do Douro, la Associação Genuíno Cobertor de Papa (Guarda), las Cámaras Municipales de Castro Daire, Fundão, Gouveia y Seia y la Colección particular Daniel Cruz Sagredo, cedidas por el Ayuntamiento de Aldeadávila de la Ribera.
El horario de visita es de miércoles a sábado de 9:30 a 14:30 horas y de 16:00 a 18:30 horas. Los domingos la apertura es solo por la mañana. La ermita permanecerá cerrada los días 25 de diciembre y 1 de enero.
Reflejo del poder civil y militar de la localidad dentro de la región portuguesa de Tras os Montes, la ciudad de Miranda do Douro adquirió también poder eclesiástico cuando fue elegida para instalar la primera diócesis episcopal de Tras os Montes en 1545.
Su cualidad fronteriza la hizo grande como ciudad amurallada y plaza fuerte con castillo. Sin embargo, la expuso a una constante incertidumbre ante la posibilidad de recurrentes ataques castellanos.
Uno de ellos, es tristemente recordado en la localidad, pues mermó su población en más de un tercio e hizo desaparecer multitud de construcciones, entre ellas, el castillo. Sucedió en 1762, en el contexto de la Guerra de los Siete Años, cuando el ejército español de Carlos III invadió la comarca. Un polvorín, con cerca de 500 barrilles de pólvora fue alcanzado por un cañón, haciendo volar por los aires las cuatro torres del castillo y barrios enteros, provocando la muerte de más de 400 personas.
Este hecho originó un gran declive demográfico, económico, militar y eclesiástico, y está relacionado con una de las más célebres leyendas mirandesas, como es el milagro del Menino Jesús de Cartolinha, cuya imagen es venerada en una vitrina de la catedral, siendo con frecuencia objeto de regalos por parte de la población de la comarca.
La beligerancia a la que se veía expuesta Miranda por hallarse en un cirro sobre la orilla derecha del Duero en su entrada a Portugal también provocó que la diócesis trasmontana se trasladase a otra localidad que, aunque también cercana a la frontera, está más resguardada.
A finales del siglo XVIII la sede episcopal se ubicó en la ciudad de Bragança, quedando inicialmente la sé de Miranda como concatedral, para perder después esta condición.
Con todo, a la iglesia principal de Miranda do Douro se la conoce como Catedral de Miranda, por su pasado, pero también por su gran porte.
Estructurada en un cuerpo central arropado por dos sólidas torres, en su interior está dividida en tres naves abovedadas.
El opulento retablo mayor, obra del español Gregorio Fernández, -maestro gallego afincado en Valladolid-, el órgano barroco del siglo XVIII y la rica imaginería, de la que forman parte el Senhor da Piedade o la Virgem do Leite, hacen de este templo una visita obligada para quien quiera descubrir Miranda.
Aunque la villa ya no posee el atractivo comercial que tuvo en otro tiempo para los españoles, ha mantenido este cariz mercantil, con varios productos locales aún son muy demandados, como los Cuchillos y Navajas de Palaçoulo, los muebles de madera, la forja, la joyería artesanal o los bordados, además de algunos productos alimenticios.
Miranda do Douro es la capital de un concejo de unos 8.000 habitantes repartidos en 13 parroquias. La lengua mirandesa que aquí se habla es idioma oficial en Portugal, junto con el portugués, y procede del asturleonés.
Más información sobre el programa ‘Cruzando la Raya’ en www.turismocastillayleon.com/cruzandolarayasaboresdelafrontera