La actividad, centrada en la elaboración de dulces, busca fortalecer el vínculo entre la escuela y el entorno familiar a través de la experimentación sensorial.
El Colegio Santísima Trinidad de Salamanca ha celebrado este jueves una jornada lúdica y educativa centrada en la gastronomía. Bajo la premisa de crear 'dulces momentos para crecer juntos', el centro educativo ha organizado un taller dirigido específicamente a familias con niños y niñas de 1 a 3 años, convirtiendo las instalaciones en un espacio de encuentro intergeneracional.
La actividad, que ha estado abierta tanto a miembros del centro como a familias externas, ha tenido como objetivo principal unir la infancia, la familia y la escuela en torno al aprendizaje compartido. El colegio se ha transformado durante la tarde en un escenario de experimentación donde el aroma dulce y la participación activa de los más pequeños han sido los protagonistas.
La propuesta pedagógica se ha estructurado en tres talleres temáticos diseñados para permitir a los niños explorar, manipular y crear con sus propias manos, siempre bajo la supervisión y acompañamiento de sus familiares. Las actividades desarrolladas han sido:
Más allá de la vertiente lúdica y culinaria, la iniciativa ha perseguido un propósito educativo esencial: reforzar la relación entre el entorno familiar y el centro escolar. Desde el Colegio Santísima Trinidad destacan la importancia de generar espacios donde adultos y niños puedan compartir tiempo de calidad y construir vínculos emocionales seguros.
Según señalan desde la institución, este tipo de propuestas permiten "hacer familia" y generar comunidad, recordando a los participantes que la educación es una tarea compartida. La jornada ha servido para que las familias se sientan parte activa de una comunidad educativa abierta, demostrando que la colaboración entre la escuela y el hogar enriquece la experiencia vital de la infancia.