Con un presupuesto de 5,4 millones de euros, utilizará la tecnología para agilizar la valoración del grado de dependencia y ofrecer un mayor apoyo a los cuidadores
El Ayuntamiento de Salamanca, en colaboración con la Universidad de Salamanca (USAL) y otras entidades sociales, pone en marcha el proyecto TRUST, una innovadora propuesta seleccionada por la Unión Europea para revolucionar el sistema de apoyo a las personas dependientes. La iniciativa se valdrá de herramientas como la inteligencia artificial para mejorar los diagnósticos y aligerar la carga de los cuidadores no profesionales.
El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha presentado hoy los detalles de esta iniciativa, que ha sido una de las veinte seleccionadas en toda Europa en la última convocatoria de la Iniciativa Urbana Europea para Acciones Innovadoras. El proyecto está financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y es uno de los dos únicos elegidos en España.
El consorcio que desarrollará TRUST está formado por el Ayuntamiento de Salamanca, la Universidad de Salamanca, la Fundación Asprodes, la Federación de Asociaciones de Mayores de Salamanca (FAMASA) y la empresa Khora Urban Thinkers. La iniciativa cuenta con un presupuesto total de 5.438.871 euros, de los cuales 4,4 millones son aportados directamente por los fondos FEDER. La fase de ejecución se prolongará durante los próximos tres años y medio.
García Carbayo ha enmarcado este proyecto en el compromiso de la ciudad con sus mayores, destacando que Salamanca es un “ejemplo de atención” gracias a programas que suman cerca de 8.500 usuarios. En este contexto, ha recordado la reciente aprobación del V Plan Municipal de las Personas Mayores, centrado en combatir la brecha digital, la soledad no deseada y el edadismo.
La iniciativa busca una transformación integral del sistema de apoyo a la dependencia, actuando sobre tres ejes principales: las personas dependientes, los cuidadores no profesionales y los trabajadores sociales. El objetivo es utilizar la tecnología para crear un modelo más eficiente, ágil y humano.
El proyecto se alinea con la estrategia Salamanca Tech, que promueve la transferencia de conocimiento y el uso de la tecnología para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Para ello, se implementarán tres herramientas tecnológicas clave que modificarán desde la solicitud de reconocimiento de la dependencia hasta el seguimiento continuo de los usuarios.
El alcalde ha explicado que la mejora en la atención se sustentará en un sistema tecnológico avanzado que combina la monitorización de los hogares con el análisis de datos mediante inteligencia artificial. El proceso se estructura en tres fases:
Uno de los pilares del proyecto TRUST es mejorar la situación de los cuidadores, que en su mayoría son familiares y mujeres. La monitorización continua de la persona dependiente a través de los sensores aliviará sensiblemente su carga de trabajo y preocupación.
Además, el sistema de ‘machine learning’ aprenderá a anticiparse a situaciones de riesgo y mejorará el sistema de alertas. Este soporte tecnológico se complementará con un programa de apoyo y formación específico para los cuidadores, basado en el éxito del programa Salamanca Acompaña.
Toda la infraestructura del proyecto se gestionará desde un nuevo centro municipal tecnológico que se ubicará en el antiguo albergue Lazarillo de Tormes, en el barrio de Chamberí. García Carbayo ha señalado que se acometerá una “transformación de las actuales instalaciones para convertirse en un espacio de innovación”.
Este centro no solo albergará la parte técnica del proyecto, sino que también funcionará como “un lugar de apoyo emocional y psicológico, así como de formación y capacitación a los cuidadores”, ha añadido el alcalde.
García Carbayo ha concluido que se trata de un proyecto “muy ambicioso”, pero sobre todo “humano, solidario, sensible y realista”. “Una de esas iniciativas que de verdad contribuyen a hacer una sociedad mejor al cambiar por completo el paradigma de un ámbito como es la atención a la dependencia”, ha recalcado.