Ecoembes colabora en los ayuntamientos para poner contenedores para el reciclaje de envases cerca de las personas, facilitando el reciclaje, mejorando la circularidad y reduciendo el impacto en el medioambiente.
A la hora de hablar de reciclaje, no solo cuenta la persona que deposita el envase en el contenedor correspondiente. Junto a ella, existe una cadena de actores que se encuentran coordinados para que este final sea posible. Y es que la circularidad de los envases es un objetivo que se encuentra cada vez más cerca.
De esa manera, el ciudadano se presenta como el eslabón final de un proceso en el que también colaboran fabricantes de envases, ayuntamientos, SCRAP (Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor), plantas de tratamiento y centros educativos. Cada uno de ellos, con su aportación específica, hace posible que reciclar sea menos un sueño y más una realidad.
En este punto, Ecoembes, organización referente en reciclaje de envases en España, colabora con los diferentes actores involucrados en el proceso de reciclaje, asesorando e incentivando acciones que contribuyan a una economía circular. Así, materializar un futuro sin residuos se acerca cada vez al momento presente.
La colaboración de las empresas y Ecoembes se torna crucial, ya no solo a la hora de la gestión de los envases domésticos, comerciales e industriales, sino desde el punto de partida de la fabricación, asesorando para conseguir su circularidad.
En la actualidad, las empresas gestionan diversos tipos de envases, donde la facilidad para cumplir con la normativa y conseguir la circularidad es clave. En este contexto, Ecoembes colabora con una red de más de 23.000 empresas de diferentes tamaños y sectores para convertir esta necesidad en una realidad.
De esta manera, proporcionan a las empresas una solución integral y de calidad con la que ponen de manifiesto su experiencia e innovación en el camino hacia la economía circular.
Otro integrante fundamental de la red de reciclaje es el ciudadano. De la misma manera que las empresas tienen un papel de peso en el inicio de la cadena, el ciudadano toma el relevo al final de la misma.
De esta manera, Ecoembes colabora en los ayuntamientos para poner contenedores para el reciclaje de envases cerca de las personas, facilitando el reciclaje, mejorando la circularidad y reduciendo el impacto en el medioambiente. También, conjuntamente han realizado campañas de concienciación para consolidar la necesidad de tener más presentes que nunca las 3R, es decir, reducir, reutilizar y reciclar, en el camino hacia la circularidad.
Y todo esto tiene una consecuencia positiva que se hace palpable en las cifras que se recogen en 2024 sobre el reciclaje de envases domésticos. Ecoembes gestionó 1.560.404 toneladas de envases domésticos, un 5,4% más que el año pasado.
Además, desde TheCircularLab, centro de referencia de la economía circular, el área ciudadana se ha instaurado como una manera de conseguir una mayor implicación. Así, se abre una vía de comunicación directa y eficiente para escuchar y ayudar a reciclar más y mejor.
Y, también, disponen de un blog con consejos e información útil para fomentar la sostenibilidad y la circularidad de los envases.
En la colaboración para el desarrollo de una economía circular con los diferentes actores que integran la red de reciclaje, también cobra peso en el campo de la educación y formación medioambiental.
Desde proyectos como TheCircularCampus, un hub de conocimiento y formación en economía circular y envases para las empresas colaboradoras, hasta proyectos como Naturaliza y recursos para la conciencia de la importancia del reciclaje y la circularidad desde las aulas, Ecoembes acerca a todos herramientas para el desarrollo de la economía circular.
Así, Ecoembes impulsa una red de colaboración que abarca desde la gestión empresarial hasta la educación ambiental ciudadana.