El objetivo es mejorar la eficiencia y agilidad de las reparaciones en las 1.700 calles de la ciudad, minimizando las molestias a los ciudadanos gracias a equipos más ligeros.
El Ayuntamiento de Salamanca ha reforzado el servicio de mantenimiento y conservación de viales con la incorporación de 17 nuevos vehículos, una flota moderna y respetuosa con el medio ambiente destinada a mejorar la eficiencia y la agilidad en la reparación de las 1.700 calles de la ciudad. El concejal de Fomento, Fernando Carabias, ha presentado esta mañana las "novedades cualitativas y cuantitativas" de un contrato que cuenta con una dotación presupuestaria anual de 2,8 millones de euros.
Durante la presentación, Carabias ha subrayado que esta renovación de la maquinaria permitirá optimizar la productividad del servicio. "Estos 17 nuevos vehículos que se van a incorporar al servicio, sin duda alguna, van a mejorar la productividad y la eficiencia del mismo", ha afirmado. La apuesta por la sostenibilidad ha sido un eje central en esta adquisición, ya que todos los vehículos cuentan con etiquetas 'eco' o 'cero', lo que contribuirá a reducir considerablemente las emisiones de CO2 y a mantener la "excelente calidad del aire" de la que, según el concejal, goza la ciudad.
Uno de los avances más significativos de esta nueva dotación es la inclusión de siete equipos con vehículos ligeros de hasta 3.500 kilos. Esta medida estratégica busca agilizar las intervenciones y minimizar las molestias a los ciudadanos. Carabias ha explicado que gracias a ellos se podrá "prescindir en muchísimos de los casos y muchísimas de las actuaciones de vehículos más pesados, como pueden ser retroexcavadoras, camión pluma o camiones externos para la gestión de escombros y residuos".
Esta mayor agilidad es clave en una ciudad con un trazado urbano complejo y numerosas zonas peatonales. "El hecho de que sean vehículos más ligeros va a permitir más agilidad, más rapidez, menos molestias en los ciudadanos", ha destacado el concejal. El objetivo es dar una respuesta rápida y eficaz a las incidencias que surgen en los más de 5.146.000 metros cuadrados de viales y 63 kilómetros de carril bici que gestiona el servicio, una labor desempeñada por una treintena de trabajadores.
El músculo financiero que sostiene este servicio se compone de una consignación presupuestaria anual de 2.800.000 euros, a la que se suman cada año otros 600.000 euros adicionales para campañas específicas de refuerzo y mejora del firme. Esta inversión, según Carabias, refleja el compromiso del equipo de gobierno con la mejora tangible de la ciudad. "Nuestro compromiso lo demostramos con obras, con hechos, no con palabras, para que tengamos una ciudad más cómoda, más accesible, siempre pensando en las personas", ha sentenciado.
El concejal también ha puesto en valor la alta satisfacción de los usuarios con el servicio de mantenimiento, especialmente por su celeridad. Al ser preguntado por las zonas más conflictivas, ha matizado que el término no es el adecuado, pero ha reconocido que "todas aquellas calles que soportan más tráfico" o las aceras con mayor antigüedad requieren una atención más constante. Sin embargo, ha asegurado que la respuesta es casi inmediata. "Cada vez que hay algún aviso de alguna baldosa suelta o de algún bordillo, pues de manera inmediata, ese día o al día siguiente generalmente está solucionado", ha concluido.