Convocados por el Sindicato de Estudiantes, denuncian que el pacto "legaliza la ocupación" y llaman a mantener la movilización para exigir el fin de relaciones con Israel.
Alrededor de un centenar de estudiantes se han manifestado este miércoles en Salamanca en una marcha que ha partido desde la Plaza de los Bandos a las doce de la mañana. La protesta, convocada por el Sindicato de Estudiantes, tenía como objetivo principal denunciar el reciente acuerdo de paz, que los organizadores tachan de "farsa", y exigir "justicia y libertad para Palestina".
Bajo la premisa de que "la lucha sigue", los manifestantes han criticado duramente un pacto que, a su juicio, no pondrá fin a lo que califican como un "genocidio" y un "holocausto contra el pueblo palestino". Según el manifiesto de la convocatoria, el rechazo al acuerdo se fundamenta en varias razones clave que los estudiantes han querido visibilizar durante su marcha por las calles de la ciudad:
Calificación del conflicto: Los convocantes sostienen que "entre Gaza e Israel no hay ninguna guerra", sino "un genocidio que se ha cobrado la vida de 680.000 personas (380.000 de ellos niños) con bombardeos, disparos y una hambruna planificada".
Legalización de la ocupación: Denuncian que el acuerdo "legaliza la ocupación de Palestina". Para apoyar esta afirmación, el sindicato atribuye a Netanyahu la siguiente declaración: "El ejército israelí permanecerá en la mayor parte de Gaza y que jamás reconocerán un Estado palestino".
Falta de justicia: Consideran que el pacto "exculpa a los genocidas de sus crímenes y les quita toda responsabilidad sobre las atrocidades que han cometido", impidiendo que haya "justicia ni libertad para Palestina".
Desactivación de la protesta social: Argumentan que la "comunidad internacional" ha impulsado este acuerdo para "desactivar un movimiento" de protesta global que "les cuestiona y les desafía", citando las recientes movilizaciones masivas en países como Bélgica, Reino Unido o el propio estado español.
Una perspectiva histórica: "Palestina lleva sufriendo la ocupación desde 1948"
Los manifestantes han querido subrayar que el conflicto no comenzó el 7 de octubre de 2023. En su comunicado, recuerdan el inicio de lo que denominan la Nakba ("catástrofe" en árabe) en 1948, que según sus datos supuso "la expulsión por la fuerza de 750.000 palestinos, el robo de sus casas y tierras, y el comienzo del apartheid".
Afirman que desde entonces, la población palestina "carece de cualquier derecho" y vive a expensas de Israel, que "controla sus recursos (como el agua), invade sus tierras expulsándolos de sus casas y asesina a palestinos, incluidos niñas y niños, sin ningún tipo de consecuencia".
Lejos de considerar el acuerdo como un punto final, el Sindicato de Estudiantes ha hecho un llamamiento a "vaciar las aulas" y a continuar la lucha junto a profesores y el resto de la clase trabajadora. El objetivo, según explican, es forzar a los gobiernos, incluido el de Pedro Sánchez, a tomar medidas concretas.
Entre sus exigencias se encuentran "un embargo de armas real y que se corten de verdad todas las relaciones con el estado sionista". La manifestación ha concluido con un llamamiento a seguir el ejemplo de movimientos pasados, como las protestas contra la guerra de Irak, para lograr mediante la "lucha de masas" el objetivo final: "¡Por una Palestina libre desde el río hasta el mar!".
Fotos y vídeo de David Sañudo