El festejo, con vaquillas de Antonio de Casasola, fue el acto principal del último día, que también incluyó juegos y una yincana, para finalizar con una chocolatada
Valderrodrigo ha puesto el broche de oro a sus Fiestas de las Madrinas en la tarde de este lunes, 6 de octubre, con una emocionante y concurrida capea al estilo tradicional que ha servido como colofón a cuatro intensos días de celebración. La plaza se ha llenado de aficionados para presenciar el último gran acto del programa festivo.
El ambiente festivo, animado incansablemente por las peñas, ha sido el marco perfecto para un festejo en el que no han faltado mozos y mozas valientes que han saltado al ruedo para medir su destreza y coraje. El público ha podido disfrutar de vistosos recortes y quiebros, tanto con el uso de engaños como demostrando su arrojo en el espectacular toreo a cuerpo limpio.
Las vaquillas, pertenecientes a la ganadería de Antonio de Casasola, dieron un buen juego y permitieron el lucimiento de los aficionados, cerrando con éxito el capítulo taurino de las fiestas de este año.
Este festejo taurino ha sido el colofón a una jornada de cierre que comenzó por la mañana con juegos infantiles tradicionales y una divertida yincana de peñas que llenaron de risas y competición las primeras horas del día. Posteriormente, la hermandad continuó con la comida de Lunes de Madrinas en cada una de las peñas, un momento de confraternidad para despedir las celebraciones. Las fiestas llegarán a su fin definitivo esta medianoche con una tradicional chocolatada en el Bar-Cafetería Desi, un dulce epílogo para unas intensas Madrinas 2025.